jueves, 23 de junio de 2011

Los días de la investigación

Esta entrada es espoilerosísima por definición: aquí se analiza el final de la primera temporada de The Killing.


Decir que hay dos corrientes de opinión acerca del final de The Killing es equivocarse de medio a medio. La cosa va más allá. Por un lado están los que consideran que el concepto de la serie y su ejecución ha sido algo más que correcto, que ha ido más allá de los parámetros de la ficción criminal, y después están los detractores. Estos se pueden dividir entre los que opinan que nos mintieron con respecto a la serie (por culpa de que aún queden dudas sobre la identidad del asesino) y luego están los que simplemente consideran que toda la serie ha sido una decepción, no solamente el final, y que las críticas deben ir más allá del cliffhanger. Podéis imaginar que soy de este último grupo (y si queréis escucharlo por eso existe el último podcast Yo Disparé a J.R.).


Según algunos de sus defensores, The Killing era una serie casi experimental que quería desmarcarse de todo aquello hecho anteriormente y su creadora, Veena Sud, hasta ha argumentado que quería pasarse por el forro la estructura de un caso por temporada e ir donde el relato se lo requiriera. Por esto no podía resolver del todo un caso como el de Rosie Larson en trece días. No creía que fuera orgánico comprimir un relato por necesidades más formales que narrativas.


Esta explicación sobre porqué The Killing ha sido contada de esta forma lo encontraría loable si la hubiera leído a priori y sin haber visto el resultado final. Pero las declaraciones ahora mismo hasta me parecen contradictorias. Ella misma estructuró el relato en días y lo más cachondo es que muchas veces cortaba el relato por lo sano para dejarnos cliffhangers que nos obligaran a ver el siguiente episodio. ¿Cuántas veces el día queda cortado sólo para dejar con ganas de más? Si la estructura te agobia, ignora la estructura por días. Pero si hablas sobre escribir un relato orgánico, lo menos orgánico que hay es cortar acciones justo a la mitad de forma sistemática sin beneficiar el relato.


Otra cosa, sin embargo, es que por omisión dejara creer al espectador que iba a resolver la incógnita de forma clara al final de la temporada y que al final no lo hiciera (como sí ocurría en la versión danesa que, también es cierto, tenía más episodios). En realidad tampoco soy de la opinión de que lo deje todo a medias: tenemos motivos para creer que Richmond es el asesino (aunque probablemente no lo sea) y vemos su arresto (he aquí un final), y los cliffhangers son casi un añadido tras cerrar un pequeño ciclo dentro de la investigación. Primero abren el apetito para saber más de Holder y sus malas artes, y después tenemos el más artificioso de Belko (¿disparando o sólo intentándolo?) que repite el error del patriarca Larsen de querer tomarse la justicia por su mano al cargarse su familia (un déjà vu en toda regla).


La intención, por eso, era crear un matiz sobre una tragedia como la de Rosie Larsen: cómo afectaba a los investigadores (Linden deja su vida en stand by), a la familia (Michelle Forbes y su cara de sufrimiento) y a una campaña política en su recta final, cuando cualquier vinculación le puede costar unas elecciones. Pero la impresión que me ha quedado es que el dolor familiar no dio para tantos minutos; que el retrato de Linden y Holder llegó demasiado tarde (esperar al antepenúltimo episodio para dibujarlos es un too little, too late); y que la campaña política estaba cogida con alfileres, con unos actores que estaban demasiado obligados a parecer sospechosos para mantener el suspense.


Que conste que, #inmyopinion, no ha sido la peor season finale de la historia ni mucho menos (justamente el final me ha gustado más que la mayoría de los episodios) y no dejaré de ver las nuevas propuestas de la AMC por un pequeño bache (como hay gente que intenta propiciar). Otra cosa es que haya decepcionado en varios frentes y que se haya quedado a medias tanto como producto criminal (que lo es, por más que vayan de experimentales) como a la hora de dibujar unos personajes realmente carismáticos. Y aún me molesta más tener que esperar tantos meses para comprobar si finalmente el millonario Tom Drexler es el auténtico responsable del asesinato, que con su obsesión por las jovencitas, por verlas dentro del agua (de aquí las vistas al interior de la piscina) y que el guión no se esforzó en proponerlo como sospechoso, tiene bastantes números (sobre todo tras hacer una donación de cinco millones de dólares que puede haber tenido un precio).

10 comentarios:

bvalvarez dijo...

Los errores/defectos que apuntas son muy ciertos, pero como comentas todo viene de bastante más allá, no de la season finale. De ahí mi sorpresa ante muchas críticas que ponen a parir el final como si fuera un sacrilegio cuando lo que hace es continuar un poco el camino que nos había venido marcando y que se resume sobre todo en el abuso del cliffhangers en miniatura en cada capítulo. Aún así, a mí me sigue interesando. Eso sí, lo de Belko no sé si era necesario, pero bueno.

Crítico en Serie dijo...

Exacto. Si algo ha tenido la serie es que ha sido regular: mediocre de principio a fin, con un final a la (poca)altura que se merecía. :)

Donnie Darko dijo...

Ante todo, excelente guiño el 'Que conste que, #inmyopinion' jajajajaja me ha salido una carcajada nada más verlo.

Por otro lado, creo que AMC está sobrevalorada salvo por Breaking Bad y Mad Men, porque Walking Dead después del capítulo 1 del gran Darabont poco más me sorprendió y sus excelentes críticas me parecen exageradas, y The Killing sólo me abrió la boca el día que vi a Rossie Larsen metida en un capó lleno de agua.

El resto, muy olvidable...

AMC no es HBO, AMC tiene suerte de tener a Matthew Weiner y a Vince Gillian.

Un saludo!

Fon dijo...

A mí me ha parecido una muy buena temporada. Con un final sorprendente por 2 motivos: porque no era el final cerrado que todos esperábamos, y por mostrarnos como culpable (al menos en parte) a alguien que nadie sospechaba.

Julio C. Piñeiro dijo...

Aunque en la última entrada que hiciste estuve de acuerdo contigo en que la serie estaba entrando en terrenos pantanosos, los excelentes tres últimos episodios me han ganado por completo, y sí, soy de aquellos a los que la season finale le pareció excelente, y su criticismo, un tanto exagerado. Todo esto lo he dejado lo mejor expresado y argumentado que puedo en la entrada correspondiente en mi web: http://www.enclavedecine.com/2011/06/el-pasado-camina-conmigo-–-the-killing.html.

Se empiezan a concretar las influencias, no sólo de Twin Peaks (ahora mucho más de fondo que de forma), sino también de Hitchock. Y guarda una similitudes estrcuturales y conceptuales con Rubicon que me hacen empezar a pensar en un auténtico "estilo AMC" que sí puede empezar a tomar forma. Sí, me he reconciliado con el canal tras la cancelación de Rubicon, la decepción de The Walking Dead y el indignante retraso de Mad Men.

Donnie Darko, la AMC tiene también a Rubicon, una joya efímera, pero una joya al fin y al cabo.

Crítico en Serie dijo...

Donnie Darko, que conste que la media de series buenas sigue siendo alucinante. Tampoco es cuestión que ahora nos carguemos la cadena. Al fin y al cabo hicieron Rubicon, que no has mencionado y a mí me encantó. ¡Cómo la echo de menos...!

Fon_lost, 'sorprender' de por sí, no tiene porque ser ni bueno ni malo. Todo depende y soy de una opinión un tanto contraria a la tuya ;)

Julio, señor, no me compares The Killing con Rubicon. Will Travers está en el cielo, donde se merece, y The Killing no trascenderá de su tumba, el día que desaparezca. Y sigo creyendo que Twin Peaks no tiene nada que ver con The Killing. TP tenía personajes interesantes y un mundo muy claro (aunque sea por misterioso) desde el primer episodio. The Killing se queda a medias en todo.

Julio C. Piñeiro dijo...

Como bien digo en mi entrada, esas similitudes con Rubicon se pueden advertir en la manera en la que nos han estado contando unas historias que parecían no conducir a nada pero finalmente se descubre que ahí estaba todo el meollo de la cuestión.

Y en cuanto a Twin Peaks, es algo más de fondo, de que finalmente el asesinato, aunque sea más transcendente argumentalmente que el de la Palmer, sirve también para descubrir "el lado oscuro" de los diferentes personajes, pero en vez de tono surrealista, uno más bien neo-noir y sórdido.

Inma dijo...

Acabo de ver el final y no sé si me ha gustado o no. Queda todo muy en el aire eso es cierto. Yo tenía claro que el profe no había sido y al ver la piscina mi sospechoso es el millonario y después de haber visto a Holder en el misterioso coche mentando lo de la foto y a Linden con cara de Quién coño me ha dado las fotos si las cámaras no funcionan? Está claro que el político es cabeza de turco de alguien que no sabemos quién es... Y Quién es en realidad Holder?

A mí también me recuerda a Twin Peaks pero por estética, es gris aunque la otra lo era más, la BSO, el caso de la chica, un casino... claro que de Twin Peaks sigo sin recuperarme de su final y la vi hace un año más o menos esta por lo menos te deja elucubrar la otra fue WFT? Y sigo WFT?

Sobre Linden deberían contarnos cosas sobre el Trauma qué tiene porque su prometido le menta un caso anterior que igual es el Picasso o igual es otro y parece que sigue obsesionada con esto...

Ya veremos qué hacen con la 2aT!

Hopewell dijo...

Despues de ver este final me quedé con la sensación de "Anda y iros todos a cagar". Pero bueno, en general me ha parecido una serie altibajosa, con capítulos muy interesantes y otros aburridos y de relleno (el antepenultimo, sí, por mucho que mostrara la relación entre Linden y Holder es el capítulo de relleno más rellenistico que he visto en mucho tiempo) y el final, aunque me ha gustado, me ha dejado con la sensacion antes mentada.
Eso si, seguire diciéndolo aunque algunos lo consideren blasfemia... Rubicón es la serie más patata que he visto en los últimos años. Aburrida hasta decir basta y sosa como pocas. :)

luisl dijo...

La serie me habia gustado algo hasta el final. Me aguante un montón los capitulos esos de relleno que todo el mundo era sospechoso porque pensaba que en el final todo iba a explotar como en Rubicon.

Los 3 capítulos finales fueron lo mejor, el de relleno, y despues el cliffhanger que nos dejan con Richmond y el mail sonando es terrible.

Y el final me habia gustado hasta la parte del cliffhanger pero no solamente por lo de no saber el asesino sino tambien porque Holder era el único que me habia caido bien y ni me acordaba de esas conversaciones que habia tenido en los primeros capitulos, ya habia creido que lo que escondia era lo de ser drogadicto y nada mas, pero termino siendo re traicionero.

Lo de Rubicon era genial pero bueno ya la perdone a la cadena jaja.

Igualmente me decepciono mucho The Walking Dead, sacando el capítulo fue una decepción terrible. Si se hubieran apegado un poco mas al comic seria mejor. Los personajes me parecieron muy mal plasmados, 0 empatia con todos.