En los Emmy tiene que haber mucho votante que busca la inspiración para sus alfombras rojas en ‘Project Runway’. Así se comprendería que consiguiera cinco nominaciones, incluyendo mejor reality de competición y mejor presentador en una candidatura que comparten Heidi Klum y Tim Gunn. Ella por presentar las pruebas y juzgar los vestidos de los diseñadores de moda como si pasase por allí y hubiese aceptado tomarse un cóctel en el plató, y él por su humanidad y los pragmáticos consejos que otorga a los concursantes. Bueno, y también porque el programa es la perfección hecha formato y hay que reconocérselo año sí y año también (como deberían hacer con ‘The Good Wife’ y aquí seguimos todos con la mandíbula desencajada tras ver la no-nominación de Julianna Margulies).
La ventaja de ‘Project Runway’ es que, se trate de una buena edición o de una mediocre, siempre funciona. Es infalible. Porque, por más que haya cástings más inspirados que otros, siempre hay unos mínimos de profesionalidad entre los concursantes que deben probar su talento para ser diseñadores de renombre, y los brain-stormings y elecciones de telas están allí. También lo estarán siempre unos jueces elegidos con mucha inteligencia. Puede que ahora Michael Kors no esté entre ellos y le hayan sustituido por Zac Posen, pero se ha mantenido a Nina Garcia, editora de moda de Marie Claire y reina de la elegancia. Suerte de ella porque Heidi se deja seducir por cualquier vestido que brille o enseñe mucha carne.
Alargaron los episodios media hora para que así Lifetime amortizase un poquito más el formato y no se resintió por una razón muy simple: da de sí. Tiene diseñadores de moda compitiendo y siempre hay minutos del proceso de creación o de deliberación del jurado que aportan información al espectador. Hasta podría durar más, que los finales de temporada bien duran el doble o el triple y los vemos con las mismas ganas de aplaudir o abuchear al comprobar si las visiones de los artistas se han plasmado en la pasarela.
Y esta temporada, la número 12, apunta alto. Desde un principio parece contar con diseñadores con talento, destacando el trabajo de Bradon McDonald, que hizo maravillas con un paracaídas en la primera prueba, y encima hay personajes por doquier. Lo cual significa que habrá drama y también creaciones intrigantes, lo que hace la edición tan estimulante como entretenida. Así que ya tenéis otra recomendación de ‘Project Runway’, este concurso que espero que algún día lleven a España. ¿Acaso no sería interesante que un canal produjera una edición durante la semana de la moda en Cibeles? Puede que no tenga tanto filón como ‘Masterchef’, pues todos tenemos estómago, pero tiene la ventaja que podemos juzgar desde el sillón de casa, algo que con la comida no podemos.
5 comentarios:
A nosotras nos encanta, pero echamos de menos a Michael Kors: Zac Posen no tiene esa gracia :(
yo vi las primeras temporadas, pero como me desconecte mucho de la tele no la volvi a ver :)
A mi esta temporada me esta gustando mucho, se extraña por supuesto a michel kors y sus comentarios acidos y demas, pero la escencia del programa sigue, tim gun y sus caras cuando no le gusta algo son lo maximo :D
Ay, ¡cómo se echan de menos los comentarios de Michael Kors! Por suerte, nos queda Nina. Sin ella, no sé qué haríamos.
Yo me he enganchado mal y tarde: con la temporada 11, que va por equipos. Pero es la que había entera para ver del tirón...
Y, bueno, habiendo visto antes varias temporadas de 'RuPaul's Drag Race' no puedo evitar pensar que esto es la copia :-P
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