Hay series que marcan a una generación. Sensación de Vivir (Beverly Hills: 90210) fue una de estas. Aún recuerdo las cartitas con imágenes e información de la serie que se podían intercambiar en los patios de los colegios. El corazón indomable de Dylan, la guapita de cara Kelly, los hermanos Walsh... todos ellos pasaron a ser iconos de toda una generación en los noventa. A partir del 2000, se fueron directamente al olvido.
Claro que todo el mundo tiene algún apunte más o menos idealizado en el baúl de los recuerdos. ¿Quién iba a borrar de su mente, por ejemplo, a la virgen más conocida (con perdón de María), o sea, Donna? Sin embargo, la memoria es selectiva y, aún en antena, la gente ya empezó a deshacerse de ellos. Pocos son los que recuerdan que Andrea se fue con un latino con quien tuvo un hijo (en lugar de salir eternamente con Brandon), que Brenda desapareció a Francia para no volver en tan sólo cuatro años de programa (de los diez que duró) o que Dylan no participó en casi 100 episodios.
Peor suerte tuvieron los actores que participaron en ella. Como si de una maldición se tratara, uno a uno han tenido problemas a la hora de seguir con sus trayectorias fílmicas que nunca han llegado a fructiferar fuera del marco de la televisión. De esta manera, Tori Spelling (Donna), la hijísima del productor de la serie, hizo de reírse de si misma un profesión (con cameos en Scary Movie incluidos). Luke Perry, en quien recaían las mayores esperanzas de prosperar en el cine, no pasó de ser carne de telefilm y alguna pequeña aparición en el cine (sírvase El quinto elemento de ejemplo). Y parecidos fueron los casos de las demás personas del elenco.
Shannen Doherty pasó de ser Brenda a embrujada, Jason Priestley (Brandon) se perdió en papeles de poca monta, se ha podido reencontrar a Brian Austin Green (David) en Terminator: Las crónicas de Sarah Connor, a Ian Ziering (Steve) en el programa Dancing with the stars, la versión americana del Mira quién baila de La Primera, y a la rubia por excelencia de esa década (aparte de la vigilante de la playa Pamela Anderson) Jennie Garth (Kelly) en el vehículo de lucimiento de Amanda Bhynes, una auténtica estrella de carpetas en Estados Unidos que le robaba la función (Garth tenía nulas dotes para la comedia).
Solamente Hilary Swank (sí, la doble ganadora del Oscar por Boys don't cry y Million Dollar Baby) ha sobrevivido al ciclón del olvido que arrasó con el resto del cast. Esta actriz, que participó en 16 episodios y protagonizó los joviales créditos de la octava temporada, interpretó a una madre soltera de quien Steve se enamoró.
Ahora, ocho años después de que se despidiera Sensación de Vivir, Jennie Garth, Tori Spelling y Jason Priestley volverán al concepto que les dio de comer y que también los condenó a ser, para siempre jamás, Kelly, Donna y Brandon. The CW está rodando un spin-off de la serie que pasará a llamarse 90210 (el código postal por excelencia) y donde los adolescentes serán otros. Spelling y Garth retomarán sus papeles y pasarán a ser las adultas-guía del nuevo rebaño de descarriados (como en su momento lo fueron los padres de la familia Walsh o el camarero Nat) y Priestley ha pedido dirigir algunos episodios.
Este movimiento de la cadena The CW de hacerse con la mayor cantidad del antiguo reparto es obvio que ha sido una potente estrategia promocional. No sólo se contentan con enganchar a una nueva generación (la que ha pasado la pubertad en el nuevo milenio) sino también a aquellos que en su momento se quedaron sin respiración a cada cambio de chica de Dylan (de rubia a morena). Además, para esta revisitación también se ha contratado a un actor protagonista de otro icono de los noventa, Melrose Place. Rob Estes, que se lo ha visto hace poco en la fallida serie de detectives El club contra el crimen, encarnará al padre de dos de los chavales que aparecerán. O sea, que se convertirá en el nuevo patriarca Walsh.
Debe reconocerse que la inclusión de todos estos actores juntos en el nuevo 90210 obligan a esperarlo con una ilusión inusitada para un producto de este calado. Reencontrarse con dos pilares fundacionales de nuestros primerizos revoloteos hormonales es una razón de peso. Por otra parte, también resulta triste que hayan tenido que acabar aceptando estos papeles. Todos ellos acercándose o sobrepasando la cuarentena y regresando al nido, como un cuarentón que se queda al paro y tiene que volver a casa de sus padres. Sólo espero que esta nueva hornada de adolescentes tenga éxito: de no ser así, este regreso será doblemente triste.
10 comentarios:
Toda la razón, esperemos qeu el vaya bien a la serie, porque sino menuda pena...debe de ser muy duro después de tanta fama caer en el olvido más absoluto.
recuerdo que fué un boom, en el cole todos la veían estaban enamorados de Brenda y ellas de Dylan. ¿Estará a la altura esta serie? yo voy a verla, y creo que si gossip girl ha tenido éxito esta puede tenerlo. eso si, que no saquen la música de la cabecera!!
No se por qué, pero yo siempre fui más de Melrose Place...
Buff!! Vaya notición!! jejejeje, esperaré paciente para ver este remember que no se porque pero me da que se quedará en un churrete, de momento, démosle un voto de fe.
Un abrzo!!!
Sinceramente, a mí solo me viene flash de la serie, no recordaba ni un solo nombre o alguna situación en concreto. Además que mezclo esta con Melrose Place...
al principio no me llamaba ni lo más mínimo, ahora nose si por las chicas guapas o que ha pasado que me ha entrado el gusanillo.Le dare una oportunidad, haber que tal??
A ver qué tal es, porque yo de la de entonces no vi nada. Creo que era un poco peque, y a mi hermana que era más mayor me parece que no se la dejaban ver. Un saludo!!!
Yo en su momento la vi sólo al principio, cuando la cosa se empezó a complicar muchísimo me aburría.
Así que no creo que vea esta nueva versión y menos si vuelve Donna!!
A mí me gustaba de pequeño, pero la verdad es que la idea del spin-off me llama cero. Me esperaré a ver qué opina la gente y después ya decidiré si darle una oportunidad o no.
Por cierto, qué mal me caía Andrea. :P
Sunne, yo recuerdo más gente enamorada de Kelly que de Brenda...
Aunque me hace gracia que cada uno tenga manía a alguien distinto. Lucía, Tori Spelling da rabia porque es ella, pero la pobre Donna era una santa muy virgen...
Le doy la razón a ánade: la insufrible era Andrea. ¡Qué repelente!
Aunque alguien recuerda a la nazi novia de Brandon? En reposiciones vi que tenía una novia que se pasaba el rato criticando a la gente por si era de raza negra, judíos... bestial. De una poca sutileza que tiraba de espaldas.
Si yo tambien recuerdo a mas gente enamorados de Kelly que de Brenda, a mi es que esta última no me caia muy bien... era un poco repelente.
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