Sin embargo, no siempre es tan descorazonadora y desagradable. A menudo las pistas que le dejan los muertos tienen también un aire melancólico, o de cómic, o parecen pequeños cortos de alguna novela de Dennis Lehane, el autor de Mystic River y Adiós, Pequeña, Adiós. Es sorprendente que una serie que juega con la rutina como constante, pues cada día de Allison es más o menos igual que el anterior (despertarse, preparar el desayuno a las niñas, trabajar y cenar en familia), sepa otorgarse tanta entidad en el aspecto visual.
Por un lado tenemos los tintes anaranjados de la fotografía del presente de la vidente, sobre todo muy presente en el interior del hogar de los Dubois, que nos sitúa en el desierto aunque en todo el episodio no veamos un solo exterior. Y luego están las pizcas de cuento, de pesadilla, de imagen de cartón o de cromas azules, o de paisajes pintados. Así hay también novedad y, sobre todo, mucha clase.
Pero estas decisiones artísticas suelen funcionar como más macabras son los casos de Allison. No se trata de ser sensacionalista, sino que el tono onírico y las licencias que se toma el realizador, junto con la sensibilidad que tienen los guiones con la familia protagonista (como dice MacGuffin, esto es un drama familiar), dan profundidad a los casos más descarnados. Y también inquietan, y mucho. Y luego te hallas en la incómoda situación de experimentar la maldad humana en su esplendor, a diferencia de ese panfleto que busca el escándalo llamado Ley y Orden: Unidad de Víctimas Especiales.
Vivir desde los ojos de una niña un secuestro, una violación y el posterior entierro en vida es traumático (con la cámara colocada entre ceja y ceja). Esa escena antes mencionada de la mesa de operaciones, también te deja la carne de gallina. Ambos casos son del tramo final de la primera temporada, muy recomendable. Pero también hay sensibilidad incluso hacia lo más atroz, como cuando narran el secuestro de una niña a partir de la filosofía de Disney, con una princesa cautiva en lo alto de la torre de un castillo.
Sea como fuere, Medium me ha sorprendido con la guardia baja. Es fascinante, con toda su belleza y sus monstruosidades. Lo único que no entiendo es como no tiene espectadores un poco hooligans que me insultaran por no haberla visto antes.
10 comentarios:
no seré una hooligang ;) a mi me encanta esta serie, un procedimental si pero diferente porque lo más maravilloso de medium no es el poder de allison, es la familia dubois al completo, desde el marido hasta la pequeña y sobretodo bridget que se come a cualquiera en cuanto aparece...
Esos capítulos con el doctor Charles Walker son muy desasosegantes, la verdad. Dan muy mal rollo (sí, es demasiado buen personaje para que sólo salga una vez).
Ese peculiar e inquietante aspecto visual de los sueños de Allison (y de sus títulos de crédito) es uno de los mejores logros de la serie. A mí también me resulta muy interesante cómo utilizan a veces la música en ellos, y las dos o tres veces que han explorado cómo Allison fue descubriendo su don. Ahora bien, la familia DuBois es más importante que los casos, y ese dúo Joe-Bridget es genial ;)
Rebeca, el talento de Bridget es algo fuera de lo normal. Transmite una naturalidad insólita en los actores de su edad e incluso en los ya adultos.
MacGuffin, esa primera escena del episodio en que la madre llama a la puerta del doctor, abren y se encuentran la hija descuartizada... Me quito el sueño. Pensaba ver sólo ese episodio e ir a dormir, pero me jodió los planes. Casi me daba miedo salir de la habitación del mal rollo que tenía.
Ey, amigo Crítico ¿puedes decirme cuál es el episodio al que haces referencia -el de la cámara entre ceja y ceja-?
Gracias y saludos, hombre.
Eros, me refiero al 1x14, que empieza con una pesadilla de Allison en que se ve un hombre en un coche diciendo a una niña que está en el asiento de atrás que no se mueva. Y la cámara simula ser la mirada de la niña. Así que luego ves al hombre sin camiseta tumbándose encima de la cámara (violación), y luego ves que la cámara está en un agujero, oyes la niña toser mientras le cae la tierra encima del hombre que la entierra con vida. Este inicio me perturbó.
Siempre he tenido una curiosidad total por esta serie. He visto trozos sueltos zapeando por la noche y siempre me han resultado hipnóticos. Lleva en mi lista de pendientes mucho tiempo, creo que ya va siendo hora de darle una oportunidad.
Unos guiones maravillosos sustentan esta serie que junto a una familia que le coges cariño en dos episodios, me han dado muchas horas de entretenimiento y reflexión.
Visualmente nunca se cansan de buscar nuevas formas de sorprenderte, incluso utilizan las canciones de formas que no te esperas, creatividad al poder, ojalá hubiera muchas más series tan cuidadas como esta.
Los guionistas se merecen un 10. La mayoría de los casos son sorprendentes. Lo que menos me gusta es la rapidez con que se resuelve siempre el caso. Una muy buena serie para alguien muy escéptico de estos temas.
hola, yo soy de estomago debil para con esta serie, me perturba sobre todo cuando los casos son con niños, un sueño en especial de la cuarta en que una preadolecente se automutila con una navaja y su madre la encuentra ensangrentada me puso mal, la verdad no le doy continuidad por eso. Me quedo con otras mas light.
anonimo de Mexico
Watanabe, efectivamente ya es la hora. Este post es una señal ;)
Satrian, a MacGuffin le encanta hablar de los usos musicales en esta serie. Pero yo me quedo con su cuidada puesta en escena visual. Como tú dices, cada episodio es distinto al anterior.
Javier, se resuelven de forma rápida pero no me atrevería a decir que tramposa, porque las reglas del juego están encima de la mesa. Y mientras que a menudo salva al mundo... sus conclusiones no suelen ser perfectas. En el sentido que siempre hay una connotación negativa, algo a medio resolver o la certeza de que tal acto volverá a repetirse una y otra vez.
Anónimo de México, si eres de estómago débil, está claro que esto no es para ti. Y hay muchos casos con niños de por medio, que son el doble de crueles.
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