miércoles, 17 de febrero de 2010

Misfits, unos marginados muy guays

El primer reto al que se enfrenta una serie de televisión es la predisposición del espectador. Personalmente, cada vez me cuesta más ponerme con una serie nueva, de la que la mayoría de veces espero muy poco, o sencillamente no me interesa lo más mínimo. De aquí que una primera escena seductora e impactante gane la mitad de la partida: hace desaparecer la holgazanería interior y nos sumerge, sin quererlo, en un nuevo mundo. Un ejemplo sería el suicidio de Mary Alice en Mujeres Desesperadas; otro sería Jack despertándose en la isla de Perdidos; e incluso sumaría a este grupo la rueda de prensa de The Good Wife. Y el último hallazgo en este sentido es Misfits. Atentos al vídeo que sigue a continuación (si el link caduca, pues tocará bajarse el episodio):




Puede parecer un videoclip para la canción Out at the Pictures de Hot Chip, pero estos cuidados planos de unos chavales vistiéndose para hacer servicios a la comunidad captó mi atención. No soy fan de las series británicas y lo primero que esperaba de Misfits era un sentido estético costumbrista y deprimente. Y si bien toda la serie está impregnada de esta filosofía, esta simple escena demuestra que a nivel estético se trata de un producto moderno (con todas sus connotaciones) y que los diálogos son agudos. Primera interacción, primera diana.


A partir de aquí, todos los elementos convergen para subir esta serie a la categoría de guay. No hay adjetivo que le sienta mejor. Lo tiene todo: unos antihéroes teen con superpoderes, una selección musical muy acertada, un elenco revelación (con una especie de Shia LaBeouf inglés en cabeza), una fotografía cuidada y unos diálogos repletos de tacos que no renuncian a ser inteligentes.


Misfits, además, sabe jugar con su denominación de origen. Cuando a estos delincuentes de poca monta les fulmina un rayo otorgándoles poderes, dejan claro por dónde irán los tiros. “¿Ahora somos superhéroes?”, “Calla, imbécil, esto sólo pasa en los Estados Unidos” (la cita no es textual, pero es que no soy un robot con disco duro como los repelentes de las películas y series americanas). Así, en lugar de convertirse en la típica función del don nadie que se convierte en salvador, vemos que tener poderes especiales puede ser solamente otro motivo para ser un marginado social.


Y como en todo producto guay, hay varios momentos que se te quedan impresos en la retina y que entenderéis cuando los veáis, como la muy cómica y sanguinaria persecución del primer episodio, cualquier escena dentro de la discoteca y el momento Gran Lebowsky de la bolera, por decir solamente algunos. Aunque, por significativo, la gran declaración de principios encima del tejado en el sexto episodio se lleva el gato al agua (por cierto, esta primera temporada sólo está compuesta por seis episodios).


En el apartado musical, os recomendaría que escucharais toda la banda sonora. Desde el remix de Hometown Glory de Adele, al tecno del remix de Phantom II de Justice, pasando Florence + the Machine y su tema You’ve Got The Love o Until We Bleed de Kleerup con Lykke Li. También están por allí Klaxons, Joy Division, Kraftwerk y La Roux. Pero que nadie crea que Misfits únicamente se dedica a pulsar el play a mitad de la escena: domina el arte de ilustrar sonoramente cada imagen.

14 comentarios:

satrian dijo...

El momento esto sólo pasa en los EEUU es increible, aquí hacemos las cosas de otra forma, empezando por la música y acabando por su humor negro, y Nathan es todo un descubrimiento.

Crítico en Serie dijo...

Sí, pero es un descubrimiento tanto él como los demás. Todos realmente están impecables, lo único que él se puede lucir mejor (además de cargar bastante). Y no se podría hacer esta serie en EEUU sobre todo porque no podrían decir tacos de verdad. ¿Y te imaginas a estos deshechos sociales sin poder decir y hacer mil obscenidades? Imposible. ¡Si cualquier cosa que pronuncia Kelly debe ser un insulto!

Unknown dijo...

En EE.UU. las intervenciones de Kelly debería ser un pitido de censura constante ;).

Gran descubrimiento, que bebe mucho de Skins pero que termina desarrollando una identidad propia, si cabe, más gamberra. Y en sólo 6 episodios.

Álex dijo...

Yo no pude con ella, sus personajes o no me interesaban nada o directamente me sacaban de quicio, como sucedía con Nathan. Muchos la comparan con Skins pero no creo que llegue a su altura.

SR. WATANABE dijo...

Me alegra comprobar que al final te la ventilaste del todo y que te gustó más allá de esa primera escena de la que hablas. Parece que últimamente nos hemos puesto todos de acuerdo para sacarla a relucir. Sin duda lo merece. Me gusta especialmente esa relación extraña y peligrosa entre Simon y la trabajadora social.

Saludos.
http://hablemosenserie.blogspot.com/2010/02/los-chicos-de-misfits.html

Crítico en Serie dijo...

Alex, ahora que he empezado Skins ya he visto que Misfits toma mucho de ella. Sin embargo, es injusto quitarle entidad a Misfits por la simple existencia de Skins: sencillamente nacieron en el mismo sitio. Y algo está claro: hay quien cree que la adolescencia británica está muy jodida.

ALX, Nathan saca mucho de quicio, porque parece plano de tan insoportable que es. Pero aparte de que tiene sus momentos, es muy grande esta temporada. Ojalá tuvieras un poco más de aguante ;)

Watanabe, esa escena en casa de la trabajadora social me puso los pelos de punta. Simon seguramente es el personaje más bonachón y a la vez el más peligroso. Y esa escena estaba entre el romanticismo y la psicología del violador. No hablo más, que esa relación tuvo más momentazos.

Vanessa dijo...

Para mí fue una gran sorpresa y una gran serie. Después del chasco que me llevé con Psychoville, no tenía muchas ganas de atacar a otra british, pero cuando leí los comentarios de @Thursnext, le creí e hice bien. Divertida, ácida, atrevida, ingeniosa y original. Lo tiene todo.

Kike dijo...

Reconozco que me costó lo suyo, pero al final acabé enamorado de ella y de sus personajes. Nathan es sencillamente irritante, pero Kelly y Simon son tan fascinantes que compensaban tener que aguantar al cargante del otro.

Lo peor es que 6 capítulos no saben a nada y te dejan con ganas de más. Estos británicos y sus mini mini temporadas.

Eros dijo...

Justo en estos momentos lo que yo podría destacar de la serie es su apartado técnico. Muy por encima de otras obras de la cadena.

Personas encantadores, además. Que te roban el aliento y evidentemente lo hacen a la mala.

Sátira de la sociedad. Y de nuestro complejo de dioses.

Eros dijo...

*Personajes encantadores.

Crítico en Serie dijo...

Vanessa, pues Psychoville ya la quito de mi lista de series inglesas para ver. Ya he visto Misfits, ahora estoy con Skins y la próxima parada será el GH gore :)

anade, ¡es que esto no es ni una temporada! ¡Seis episodios! Además, el episodio seis te enseña qué podría ser la serie a largo plazo, con menos serialidad y un caso por semana. Pero no. Luego termina la temporada y a esperar para... ¿cuántos episodios tendrá la segunda tanda? Vete tú a saber...

Eros, la sociedad inglesa debe estar muy mal si Misfits y Skins deben retratar algo. Una generación sin metas a largo plazo. Diría que no es una conclusión muy optimista.

Anónimo dijo...

Me he ventilado los seis episodios en nada. Alguien sabe para cuando estará la 2º temporada?

Crítico en Serie dijo...

Anónimo, no tengo fecha concreta, pero en la Wikipedia dicen que la segunda temporada se empezará a emitir en Marzo ;)

Mauro dijo...

Heroes meets Skins!