Esta entrada contiene breves spoilers sobre The Event. Vamos, que he visto tres episodios, así que no puedo ir muy lejos.
Los cuchillos vuelan con fuerza cuando toca hablar de The Event. Ya sea por cansancio, porque nos estamos inmunizando, la paciencia se ha agotado. Ha habido demasiados “intentos de” y muy pocas verdaderas “sucesoras de” (digamos Perdidos aunque también funcionaría 24) y cuesta entregarse a una serie con una fe absoluta cuando ya nos hemos dado tantas veces de bruces con versiones sacadas de los chinos.
Y es que se necesita mucha voluntad para aceptar sin rechistar diálogos más crípticos y vacíos que las frases que soltaba al aire Benjamin Linus cada vez que aparecía en pantalla. El arte de las elipsis funciona siempre y cuando se lleve a cabo con pequeñas dosis. Pero que todo el suspense dependa de un ejercicio de primaria de “fill the gaps” cabrea. Sabemos que hay extraterrestres en la Tierra (con algún tipo de plan), que hay un vuelo de consecuencias muy sospechosas (la resurrección colectiva es un buen WTF) y que una gente muy malvada, seguramente vinculada con el Gobierno (no el de Blair Underwood, tirando a blanco, sino el de Zeljko Ivanek, el hombre en la sombra), se toma muchas molestias (demasiadas) en hacer un infierno de la vida de un tipo bastante vulgaris. Muchas preguntas y pocas respuestas.
Este carácter críptico sería mucho más asumible si sólo viviéramos la historia desde el punto de vista del pobre anónimo que no sabe de dónde le baja el berenjenal. Pero seguir a todos los bandos en todo momento (y en todas las líneas temporales posibles, desde 1944 hasta tres minutos antes) sin enterarte de la misa la mitad suena a trampa. Y aún es más insultante cuando el autor de la obra, Nick Wauters, se dedicó a desmentir en TVSquad que esto iría por los mismos derroteros que FlashForward: prometió personajes en lugar de títeres y unos hilos que se irían deshilando a la vez que crearían otros nudos. Según lo visto, está claro que era pura palabrería y que esa no era su intención: hay tantos cabos sueltos con incontables nudos de marinero que es difícil imaginar que la trama pueda ser un poco más humana y menos artificiosa.
Pero aunque mi idea era dejar esta partida de póker con demasiados ases, me quedo un poco más ni que sea en modo fast-forward para ver qué ocurre con Jason Ritter y sus pesquisas, que tienen un aire a Roman Polanski en modo conspiranoico (mezclemos Frenético con el desenlace de Expediente X y encontraremos algo muy cercano al periplo de este chico). Bueno, y también quiero ver si lo pronosticado por el oráculo de la blogosfera se acaba cumpliendo.
8 comentarios:
También los de FlashForward nos vendieron antes de la temporada que tenían todo atado y previsto para tres temporadas, y que sabía hacia donde iba la serie, lo que posteriormente se vio como falso.
Tras el funesto capítulo 4 de "The Event" me tempo que solo me queda paciencia para un quinto, no vale con crear expectación haciéndonos creer que va a pasar algo, y poner un cliffhanger al final, para que una serie de este tipo funcione.
Mucho tienen que mejorar las críticas de la blogsfera para que la retome, porque como bien dices yo no veo más que una venta de humo increíble!
Saludos!
COn "Frenesí" te estarás refiriendo a "Frenético", supongo, ¿no?
Si es así, corrígelo, porque "Frenesí" es la penúltima película de Hitchcock, la del asesino de las corbatas.
Por el resto, gran artículo, como siempre. Yo soy de los que le daré un voto de confianza, aunque como dices, la discontinuidad narrativa empieza a chirriar un poco.
Saludos.
Satrian, lo que molesta, sobre todo, es que The Event quiso defenderse de las críticas flashforwardianas con mentiras. Aunque tengo que reconocer algo: me atrapa más The Event que FF. Por lo menos tiene trozos frenéticos que te esconden (durante unos minutos) que es un producto muy vacío emocionalmente.
Telespectador, según lo visto... no tendrás que volver a ella ;)
Julio C. Piñeiro, gracias por corregirme. Sí, me refería a Frenético (de la misma forma que podría haber citado El Escritor, que también andaba un poco perdido, o La Novena Puerta). Yo no la voy a dejar, de momento, porque soy como soy y me cuesta dejar según qué cosas (además, creo que es casi un deber en este caso). Pero optimismo... poco.
Creo que la clave está en lo que afirmas en tu anterior comentario: es un producto muy vacío emocionalmente. Normalmente, para que vea una serie (o al menos para que la continúe) tengo que ver algo más que parafernalia. Y en esta veo cada vez más precisamente lo que no quiero ver. Los personajes no me interesan lo más mínimo, no me dicen nada, no me cuentan nada: cliché, cliché, cliché.
Lo de la estructura narrativa ya clama al cielo.
Has descrito a las mil maravillas lo que le pasa a esta serie que, como Julio, sigo viendo, pero sin más. Cualquier día, igual que la cogí, la tiro.
Su piloto me gustó y convenció. Y de lo que he visto (me falta por ver el cuarto capítulo) sigue convenciéndome. Me temo que ocurrirá como con FlashForward, que al final fui de los pocos que se la quedó y que le veía algo. Muy mal tiene que hacerlo en los próximos capítulos para que me baje del carro. Pero sí, todos esos cables sueltos deberían empezar a ser anudados.
Los dos primeros episodios aun me entretenieron de lo que me pude reir, pero del tercero ya no pasé. Para mí es, junto a Undercovers, el gran fail de la temporada.
bvalvarez, si fuera una conspiración muy bien lubricada y en formato miniserie... colaría que los personajes no nos hipnotizaran. Pero para un compromiso a largo plazo necesitas algo más. Una lástima.
Fon_lost, ya veo que fuiste un rarito y sigues siéndolo ;) Lo de FF no tenía perdón. The Event, por lo menos, aún no llega a ser tan insultante.
Manganxet, ¿Undercovers es un gran fail para los amantes de Alias o como producto? Porque, según vi en el piloto, estaba bien como serie ligera para toda la familia.
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