jueves, 13 de octubre de 2011

Las pequeñas aventuras de los Shannon

Hay dos raseros con los que evaluar Terra Nova. Si se piensa en la serie como una superproducción que intenta ser el Jurassic Park de la televisión, que tardó dos siglos y medio en llegar a la televisión porque querían mejorar sus efectos especiales, con ciertas ambiciones narrativas y que quería ser un bombazo en toda regla, se queda muy, muy corta. En cambio, si uno decide verla como una serie propia del canal SyFy, la percepción sufre un giro de 90º (si fuera de 180º entonces significaría que es excelente y este no es su caso).


Tras un estreno que despertó bastante frustración entre aquellos que esperaban la primera opción, la molona, Terra Nova ha dejado claro cuales son sus pretensiones. Obviamente, se quedan muy cortas en comparación con lo que podía haber sido. Su esquema básico, por lo que parece, se basa en resolver un conflicto que surge en la base, aparece algún dinosaurio en un par de escenas, dedican otra a elaborar una trama mayor y los cinco últimos minutos se reservan a enseñar la unidad de la familia Shannon. Y esto, depende de cómo se mire, tampoco está mal del todo.


Se debe tener en cuenta que el presupuesto no es ese desembolso colosal que se informó en los medios. Quizá hubo grandes costes en el primer episodio, pero difícilmente el tercer episodio puede considerarse especialmente caro (típico caso de “les encerramos en una cueva que así ahorramos”). Sin embargo, también se le puede ver ciertos matices de serie ligera de aventuras como si de un spin-off familiar de Stargate se tratara, donde la falta de recursos hasta se puede convertir en una ventaja.


No me disgustó el episodio donde los pájaros eran los enemigos y justamente me pareció un acierto el episodio de la cueva donde una nueva enfermedad amenaza con borrarles la memoria a todos (para después morir). A diferencia de otras escenas del piloto, fue una trama honrada que aceptaba su espíritu de serie B y que ofreció algunos puntos interesantes, como que el amor entre los Shannon casi es cosa del destino y les ponía en una situación complicada, sobre todo porque aún están reencontrando la chispa después de que él estuviera en prisión dos años. Esto no quita que también se desaprovechó una escena que podría ser preciosa: cuando Shelly se da cuenta de quién es Jim. Una música de Michael Giaccino y una dirección más dramática (y menos serie B, paradójicamente) podrían haber hecho algo memorable.


Lo que es una lástima es que el problema de Terra Nova seguirá siendo el mismo. La esencia family-friendly que quisieron radicalizar después de que Spielberg tuviera miedo a ser demasiado adulta están perjudicando el resultado final y también le impide tener unos personajes mínimamente interesantes. Jason O’Mara funciona como marido, Shelley Conn como mujer y hasta los hijos funcionan como hijos. Pero deberían ser “Jim, Elizabeth, Josh, Maddy y Zoe” y no seguir siendo “marido, mujer, hijo, hija, hija”, que de momento es lo único que les define sin matiz alguno.

2 comentarios:

isabelha dijo...

Tambien son Syfy Stargate Universe y Alphas por citar dos muy recientes y bastante decentes todo lo contrario que esta insufrible serie para niños. Cuatro primeros capítulos decepcionantes, el último, "embotellado" ha sido un despropósito. Abandono.

Crítico en Serie dijo...

Isabelha, no me refería tanto a SGU que intentaba ser mucho más adulta (y era bastante fallida), ni a Alphas. Pero sí a cosas mucho más lights como Eureka o Warehouse que tanto gustan a algunos y son muy, muy lights. Si las comparas con estas, Terra Nova casi es excelente y todo.

(Que conste que no digo que sea excelente. Simplemente tiene su encanto si le eliminamos todas las promos de 'blockbuster' que tenía.)