lunes, 28 de mayo de 2012

El acento de Bluebell

La gran apuesta del canal CW para este pasado otoño fue Ringer. Según comentaban los norteamericanos en los foros y medios, la promoción alrededor de Sarah Michelle Gellar era bastante más presente que la de cualquier otro estreno del canal y la cantidad de repeticiones que tuvo también dieron a entender que gozaba de mayor apoyo. Pero este nuevo intento de re-enfocar la filosofía de la cadena, pasando de encontrar el público joven a partir de dramas adolescentes, fue otro fracaso estrepitoso y su obligada cancelación permitió que algo tan ignorado como Hart of Dixie sí consiguiera una segunda temporada.
La serie de Josh Schwartz, que tanto ideó el engendro de Gossip Girl como un tesoro nerd como Chuck, también tenía una clara pretensión: la de recuperar un poquito el espíritu de la WB, el canal que emitía Las Chicas Gilmore y Everwood y que desapareció cuando se fusionó con UPN para crear The CW. Un estilo de series que se alimentaba del día a día de unos seres que se trataban con una óptica positiva, intentando realzar lo mejor de ellos. Así creó una escuela de series que, a pesar de ser muy juveniles, también tenían un cariz muy familiar o por lo menos bastante comunitario. Sólo hace falta ver los cuatro trazos que se hace del pueblo de la doctora Hart para detectar cuánto se han basado en Stars Hollow o Everwood.
Quiero aclarar que, por norma general, siempre se me han atragantado estas series livianas plagadas de personajes limitados y cuyas existencias giran alrededor de la última feria o de cualquier acto sobre los miembros fundadores. Pero como concepto puedo respetarlas. Tienen clara su función (acoger con cariño a su público) y saben qué armas tienen a su disposición. Pero, incluso dentro de este subgénero, Hart of Dixie podríamos decir que es una obra menor.
Tiene tres pegas muy visibles: desaprovecha rutilantemente la esfera local y los habitantes de Bluebell tienen una vis cómica lamentable, no sabe manejar los casos médicos a su favor (podrían ayudar a presentar personajes y no ocurre), y se centra excesivamente en los tejemanejes románticos de su protagonista, la doctora Zoe Hart, cuyo triángulo amoroso flaquea. Es bastante triste comprobar cómo se le da tanto protagonismo al personaje de George, cuando Scott Porter no puede estar más incómodo en el papel, mientras le quitan la gracia al mujeriego de Wade. La química entre Wilson Bethel y Rachel Bilson seguramente es lo único natural de toda la serie.
Por esta razón, porque todo es tan forzado como el acento que emulan los actores, Hart of Dixie es muy poco respetable. Como máximo se la puede ver por su condición de placer culpable porque tiene los elementos aunque no sabe cómo combinarlos con algo de gracia. Pero, curiosamente, también comprendo y agradezco la renovación para una segunda temporada. Aparte de tener la posibilidad de ganar público, pues su argumento no es precisamente enrevesado, es un paso en la dirección correcta. La de una cadena que intenta ofrecer algo más que adolescentes con muy mal fondo y giros insostenibles. Otra cosa es que, de momento, Hart of Dixie se quede con las intenciones y su ejecución dé bastante pena.
P.D.Podcast: Mi companion y yo seguimos ebrios con tantas seasons finales y esta semana toca hablar de los desenlaces de Modern Family, Glee, House, Smash y Revenge. Claro que, como no nos gusta estar tan solos, tenemos a Irene Cívico para hablar de las dos últimas, que está probado que es una experta en sacar miga a las víboras televisivas. Podéis descargar el programa de Yo Disparé a J.R. en la barra lateral y aquí tenéis la guía del programa. Aviso: hay spoilers en todas las secciones.
- 0’: Presentación y Modern Family, las virtudes y defectos de la 3ª temporada.
- 14’: La graduación de los chicos de Glee y lo que nos espera.
- 28’: Smash. ¿Puede rectificar? Con Irene ‘Bytheway’ Cívico.
- 55’: Revenge, el descalabro final e ilusiones de cásting para la 2ª temporada.
- 77’: House, final de serie. ¿Qué nos ha dejado la serie?
- 94’: Y, para despedir, qué mejor que la ganadora de Eurovisión: Euphoria de la sueca Loreen.

3 comentarios:

manantial dijo...

A ver has probado que no puedes hablar de una serie sin haberla visto entera....Santana y Brittany si tienen una realcion y ha quedado clarisimo...Britanny no se ha echo presidenta de repente..tuvo una gran trama antes...y Unique(tu la llamaste la chica negra,en realidad es un chico que se viste de chica) si salio antes,tuvo un episodio centrado en ella......

Crítico en Serie dijo...

Manantial,
Ya vi parte de la campaña presidencial de Brittany. En realidad no me metía con que fuera presidenta de repente, sino que de repente pasó a ser capaz de soltar monólogos cuando al principio de la serie era tan tonta que sólo podía articular frases sin sentido.
Con respecto a "la chica negra", no me refería a Unique. Me refería a que, mientras actúan New Directions, hay una chica que corre por allí bailando y que jamás había visto antes para que la coreo quede mejor.
Y puede que no me quedase muy claro si tenían una relación sentimental con vida sexual activa por los últimos episodios, pero justamente dejé la serie cuando Santana empezaba a pedirlaea Brittany algo más. De hecho, me daba tanta pereza que intentaran victimizar a Santana, que fue una de las razones por las que dejé de Glee.

manantial dijo...

Bueno,ahora me he quedado mas claro,lo siento,si te he malinterpretado,pero de todos modos sigo pensando que no esta bien criticar,alabar o lo que sea una serie sin haberla visto entera,porque siempre se te escapara algo y la chica negra de la que hablas junto a otras chicas que solo bailan son parte de las chirios y aparecieron cuando Mercedes,Santana y Brittany formaron Las Troubletones....Los monologos de Brittany siguieron siento torpes,pero si reconozco que empezo a mostrar mas inteligencia,pero creo que siempre ha sido asi en cualquer serie con pesonajes tontos,por ejemplo Joey y Phoebe de Friends que son personajes tan alabados,tambien eran diferentemente tontos,dependiendo de lo que les convenia a los guionistas...