sábado, 10 de noviembre de 2012

¿La revelación de la temporada?

En una temporada como esta, donde los estrenos prometedores han brillado por su ausencia, no es de extrañar que una serie como Arrow pueda ser considerada una de las revelaciones. Puede que hubiera expectación por parte de los amantes de los cómics, pero era muy cuestionable que la CW hiciera algo decente con el material. No sería la primera vez que una premisa apetecible se les escurría de las manos por intentar homogeneizar su programación y entender erróneamente qué quería su público. Pero no fue así y me lo estoy pasando pipa con el superhéroe de la capucha.

La razón principal es que, siendo una serie juvenil, no rehuye a ser mínimamente adulta. Su personaje protagonista, Oliver Queen, puede ser un capullo integral mientras está en sociedad pero cuela como héroe torturado en la intimidad. Ya dije en su momento que Stephen Amell puede ser inexpresivo, pero ya le está bien al personaje y tiene química con quien debe tenerla (y sus abdominales siguen fieles a su compromiso de aparecer en cada capítulo).

Me gusta que tenga una vida social tan propia del canal (un guaperas sin obligaciones y rodeado de zorrones) pero en realidad traten al personaje con una perspectiva (un poco) adulta y seria. Él cambió durante los cinco años que estuvo perdido en una isla china, nos van contando cómo ocurrió (y parece que la evolución resultará coherente) y encima asume sus errores del pasado. Después de la tragedia que vivió necesita redimirse ante su antigua novia, pues se acostaba con su hermana y murió en el fatídico accidente náutico.

Su fortuna en la misteriosa isla, además, está construyendo poco a poco el perfil de Oliver y me pica la curiosidad descubrir qué pasaba allí. No da la impresión de ser una conspiración inabarcable y de momento resulta entretenido ver su formación en chino, ruso, artes marciales y tiro con arco. Sólo de ver la primera tortura a la que fue sometido, se entiende que una persona como Oliver Queen pueda cambiar sustancialmente y me quedo con ese villano con la cara bicolor. En un episodio prácticamente carente de acción por exigencias de la trama, incluyen un flashback que no solamente aporta las dosis obligadas de patadas en un producto de estas características sino que nos recuerdan que estamos en una adaptación de cómic.

Sé que, a pesar de todo lo que digo, Arrow podría ser bazofia o una producción mediocre consecuencia de El Caballero Oscuro de Christopher Nolan, pero creo que está siendo (por sorpresa) refrescante. Sus escenas de acción son muy solventes para ser televisión, hay una trama atractiva de fondo, el retrato del superhéroe me interesa, tiene el ritmo adecuado y me transmite buenas vibraciones. Ayudó, por ejemplo, cierta desviación del padrastro, que creía mucho más obvio. Podría ser sólo un refrito y, en cambio, está siendo un relato muy decente.

5 comentarios:

Mr No dijo...

Yo también la estoy disfrutando mucho, la CW está sabiendo contentar tanto a los aficionados al comic, con continuas referencias, como al espectador casual.

Desde luego ha sido una sorpresa en una temporada muy floja en cuanto a estrenos se refiere.

Uve dijo...

A mí me está gustando mucho. Aunque no es fiel al personaje del comic tiene muchisimo juego y si, para mí, una de las revelaciones.

Imagino que CW terminará dejando Beauty and the Beast (que por algo, no se, se me parece bastante a esta) y se centrará en Arrow para regalarnos alguna temporada más.

EduardoEquis dijo...

¡Pienso exactamente igual! Cuando presiono play y comienza Arrow, es el momento más refrescante de la semana.

Uno de esos detalles que también disfruto de la serie es ese constante juego con referencias a la cultura pop de los últimos años: la broma de Lost, la de Twilight y hasta al gringísimo Dr. Oz... Vamos, que una pizca de genialidad hay en esas líneas.

Vandalista dijo...

Con los tiempos que corren exigir fidelidad al concepto inicial es casi una quimera, no obstante como ya añadía el autor del post anteriomente,en Arrow algo como la calidad de sus escenas de acción son de un notable alto.
Las coreografías demuestran una fluidez y naturalidad tal que dan sensación de no ser algo calculado, algo poco frecuente en escenas de acción para televisión.
Mucho menos almibarado o pensado para el público adolescente que el personaje similar que hemos visto desarrollado en SmallVille, esta versión de Arrow podría depararnos algunas sorpresas más.

Crítico en Serie dijo...

Sí, las escenas de acción están bastante bien. Es una suerte que Amell pueda hacer 'algo' en ellas y pueda aparecer su cara a mitad de la lucha sin problemas. Acordémonos de Buffy y esa mujer super-cachas que se hacía pasar por ella con un pelucón rubio y que sabíamos perfectamente que no era ella. Por lo menos con Amell pueden hacer mitad y mitad.