Existen pocos guionistas tan sinceros (y con tanto talento) como Robert y Michelle King, que reconocieron que una trama no les había funcionado a pesar de que el nivel de ‘The Good Wife’ seguía estando por encima de las demás series. Pero los hay como Aaron Sorkin que, aunque no se disculpen por cuestiones de ego, dejan entrever que son conscientes de sus errores.
Así debió entenderse la cabecera de la segunda temporada de ‘The Newsroom’. Algunos la calificaban como clásica y otros como rancia, y han modificado la magnífica (pero pasada de moda) sintonía y la han adaptado a los nuevos tiempos. Una decisión que, en realidad, quiere comunicar que la serie se ha hecho un lavado de cara. Y los cambios o son para renovarse (algo necesita la segunda temporada de una serie), o porque algo no funcionaba. Vamos, que Sorkin sabía que se la jugaba si ignoraba todas las críticas porque, cuando tienes a toda la crítica en contra, es que quizá algo haces mal (o eres un genio incomprendido, algo poco probable teniendo en cuenta que se rendían a sus pies con ‘The West Wing’ y el estilo es el mismo).
Al principio de rodar la temporada, de hecho, él mismo pidió quemar los dos primeros episodios, los re-escribió y los volvió a rodar. Hay quienes defienden sus agallas como creador pero dudo que al canal le entusiasmara la idea de perder dinero de forma tan gratuita, pero debieron aceptar para ver si finalmente Sorkin les escribía una serie que alimentara su reputación y no que la tirara por la borda. Y estos retoques, según dicen, se notan.
En mi caso, reconozco que únicamente he visto el estreno de temporada. He leído, sin embargo, que hay indicios de mejora en todos los campos. Para empezar, la temporada se sustenta en flashbacks a partir de los cuales podremos averiguar porqué demandan a la redacción (y su abogada, por cierto, está interpretada por Marcia Gay Harden). O sea, no son profesionalmente perfectos. También dicen en el podcast de Firewall and Iceberg que hay más personas aparte de Will McAvoy que tienen momentos de lucidez e importan verdades a sus congéneres. Que finalmente se intuye que el protagonista es republicano y no solamente de boquilla. Y aun así no pienso retomarla.
El motivo es el siguiente: los personajes de ‘The Newsroom’ son insufribles. Da igual si tienen razón o no. Cada vez que abren la boca, resultan tremendamente arrogantes. Deberían ser héroes cotidianos pero resultan más antipáticos que cualquier antihéroe televisivo. Especialmente Will, cuya forma de presentar el informativo es aburrida y cuesta verle como un referente cuando parece que esté en el plató castigado. Y, encima, no soy simpatizante de la forma de escribir de Sorkin. Sí, es cierto que explica conceptos enrevesados con facilidad, pero en esta serie se notan demasiado todos los hilos cuando algún personaje empieza a soltar un sermón. Y, sin personajes soportables, no hay serie que valga.
P.D.Podcast: De ‘The Newsroom’ hablamos también en el regreso de ‘Yo Disparé a J.R.’, el podcast que grabo con Marina Such del blog El diario de Mr MacGuffin. Pero también hablamos de más cosas, incluyendo algún estreno, y aquí tenéis el menú del programa:
0’: Presentación y ‘Orange is the new black’. ¿La revelación del año?
23’: ‘The Bridge’, el remake americano de ‘Bron/Broen’.
35’: ‘Under the Dome’. ¿Aporta lo suficiente?
48’: Dejamos ‘The Newsroom’.
62’: ‘The Killing’. ¿Se resolvió correctamente el caso?
1 comentario:
Olvídate que es Sorkin y que es HBO así igual la disfrutas más...
Gran podcast y genial blog!
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