viernes, 7 de marzo de 2014

La madre de los cócteles

‘Mixology’ es una de esas series que, cuando llevas un minuto, ya sabes que van a cancelarla. Son como un género aparte, esas series que notas que no gustarán a la crítica ni al público, aunque tampoco sean las peores de su especie. Y no, ‘Mixology’ no es tan terriblemente mala como otras comedias actuales, más que nada porque las hay de horribles. El problema es que cuesta triunfar cuando eres la copia de algo que todavía está en antena. ‘Cómo conocí a vuestra madre’ puede que esté en las últimas, pero todavía sigue en pie.

‘Mixology’, además, ha tenido la mala suerte que Carter Bays y Craig Thomas están llevando a cabo un experimento. Decidieron ubicar toda la novena temporada de Ted Mosby y compañía en un fin de semana de tres días, tomándose muchas licencias para mudarse a tiempos mejores cuando les convenga pero adoptando como base de operaciones ese hotel de Farhampton. Pero esto lo decidieron cuando el canal ABC ya había comprado ‘Mixology’ y, por lo tanto, ahora que ha llegado ya es menos novedosa de lo que debería ser.

‘Mixology’ es una comedia ‘high-concept’ ni que sea por su punto de partida. Se supone que toda ella gira en torno a una noche de fiesta y toda transcurre en el bar de copas donde los personajes se conocen e interaccionan. En cierto modo, es una especie de comedia romántica y gamberra acelerada y, si en ‘Cómo conocí a vuestra madre’ no estuviéramos viendo también un experimento que juega con el tiempo, sería más refrescante. No lo es. Tampoco ayuda que entre los personajes principales podamos ver un símil de Ted Mosby, otra de Robin y un Barney con acento británico.

‘Mixology’, no obstante, no me resulta tan antipática como a otros. Ni que sea por su base rom-com, hasta me resulta pasable. Pero esto también me sucedió en octubre con ‘We Are Men’ de la CBS, que todo el mundo detestó abiertamente y celebró su cancelación cuando ocurrió. O quizá es que tengo tan asimilado que será cancelada que mi subconsciente me engaña y me dice “será breve, así que tampoco hace falta que te hierve la sangre’. Como tampoco me hirvió la sangre esta semana cuando me di cuenta del giro de ‘How I Met Your Mother’. Bueno, en realidad me di cuenta cuando acabó el episodio y tuve que buscar en blogs a qué se refería tanta polémica. Luego lo entendí y también tiene sentido.

Si Thomas y Bays habían planeado terminar la serie con la imagen de la madre comprando el billete de tren, era imaginable que pensarían otra forma de sorprender de cara al tramo final y absoluto. Y, aparte de lo mal que actúa Josh Radnor en esa escena en cuestión (¡bochornoso!), no me disgustó esa supuesta revelación. No rompería ningún equilibrio vital y no es como si los creadores no disfrutaran de vez en cuando soltando instantes de ese calibre. Eso sí, cada vez que escriben escenas así, hay polémica.

3 comentarios:

Beiña dijo...

¿Cuál es la polémica de How I met your mother? No me he enterado.

Crítico en Serie dijo...

***SPOILER****
Que todo apunta que la madre está muerta en el futuro, de aquí que Ted cuente la historia a sus hijos para recordarla. Se dejó entrever en ese flashforward de Ted y la Madre, donde él llora cuando piensa en que "no todas las madres pueden estar en la boda de sus hijas". Vamos, que en ese punto probablemente ya sea enferma terminal.
***FIN DE SPOILER****

Sandra Urkidi dijo...

Ah, si?? Pues yo lo había entendido como que la madre de Madre no estuvo en la boda… claro que con el truño de temporada que se están marcando que termine con una muerte ya sería el colofón :-(