La carrera a contrarreloj

El tiempo de espera de las consultas médicas de la Fox y Cuatro se ha reducido drásticamente. A diferencia de los cursos pasados, en los que los pacientes debían esperar por lo menos cuatro meses a que les atendieran, el doctor House y los cirujanos del Hospital Saint Grace están listos para pasar visita en español tan sólo un mes después de hacerlo en Estados Unidos. Y es que esta noche la cadena de Sogecable estrenará la quinta temporada de Anatomía de Grey, en emisión al otro lado del Atlántico desde finales de septiembre, y la Fox inaugurará la nueva de House, el niño mimado de Cuatro.

Esta carrera a contrarreloj para doblar las dos series y emitirlas en un tiempo que actualmente es record en la parrilla generalista tiene dos finalidades: la primera, no desfallecer en el territorio de las audiencias en el que Cuatro se está viendo estancada; y segundo, motivar a los espectadores a ver las series al ritmo español. De esta manera se intenta que los fans de las series no crean necesario ver sus programas favoritos con una calidad de la imagen bastante peor y sin estar doblada por un lapso de tiempo cada vez menor.

Las nuevas tecnologías, en los últimos años, están truncando el orden de visionado de las ficciones extranjeras. Anteriormente, los seguidores tenían la paciencia infinita de esperar a que los canales emitieran sus series cuando lo creyeran oportuno. Ahora los espectadores son quienes eligen cómo y cuando las quieren ver gracias a los programas de intercambio de archivos peer-to-peer, las páginas de internet que ofrecen subtítulos y las webs de streaming, que no obligan a descargarse el vídeo en el ordenador. Además, los programas para cambiar el ip de los ordenadores (el identificador) como HotSpot Shield también permiten acceder a las páginas de los Estados Unidos que solamente dejan ver los vídeos a los residentes del país (Pandora, Hulu). Es la nueva forma de ver televisión.

Este método, cada vez más establecido en la sociedad, es la razón por la que series como Perdidos logran tanta repercusión en el circo mediático (televisión, revistas, internet) y en cambio registran tan malos índices de audiencia. Los seguidores ya no están necesariamente delante de la pequeña pantalla; hay otra. Y para cadenas como Cuatro, que depende de la ficción foránea como Medium, Dexter y Ugly Betty, esta programación paralela es un duro rival. No obstante, no sigue los mismos parámetros con todas sus series y, mientras que las dos series hospitalarias gozan de un trato especial, Cinco Hermanos fue estrenada hace un par de semanas después de haber sido emitida en Estados Unidos hace más de un año. Pero la única solución no viene de la mano de las cadenas en abierto.

El año pasado, los canales de Digital+ ya empezaron a ofrecer sus series estrella primero en versión original, para frenar esa fuga de audiencia a la red. Así Canal+ estrenó una de las últimas ganadores en los Emmy, Pushing Daisies, el canal Cosmopolitan emitió la revelación adolescente de Gossip Girl y la Fox ya ofrece desde el año pasado House en VOS, aunque no en el prime time sino a partir de la medianoche.

El afán de superación sigue latente en las programaciones y esta temporada la estrategia más reveladora ha sido la de Fringe. Esta nueva serie creada por J.J.Abrams, el creador de Perdidos, que se empezó a emitir el mes pasado en Estados Unidos, se puede comprar cada semana en taquilla con subtítulos tan sólo dos días después de su pase original. Gracias al eco conseguido por esta serie, que pretende convertirse en la nueva Expediente X y que se perfila como el nuevo objeto de culto de la televisión, Digital+ decidió adelantarse a los deseos de los amantes de las series. Ahora sólo hace falta ver si esta voluntad de inmediatez se pasa a los canales gratuitos de la red digital o pública sin tener que pagar adicionalmente dos euros.