lunes, 22 de noviembre de 2010

La involución de Cathy

Esto es un balance de la decepcionante primera temporada de The Big C. Hay spoilers, sí, pero nada que no se oliera a bastantes leguas de distancia.


La duración de treinta minutos de las comedias de Showtime es una arma de doble filo. Queda bien diferenciarse de la competencia ya desde un punto de vista formal, pero muchas veces al acabar el episodio se tiene la sensación de que o bien le sobraban unos minutos o que quizá le faltaban unos cuantos. Es el inconveniente de quedarse entre dos aguas, entre la comedia y el drama, y The Big C no es la excepción que confirma la regla.


Como comedia esta primera temporada no ha encontrado el ritmo ni ha sabido encajar los secundarios en ella. Ahora, tras ver el final, más de uno se debe preguntar qué ocurrió con Andrea en los últimos episodios. ¿Alguien lo sabe? Justamente era de los elementos que mejor sabía llevar la ficción al terreno de la comedia y desapareció de la noche a la mañana. También era la única con genuina gracia y como personaje era capaz de darle algo de sentido al hijo de Cathy. Y ante una Laura Linney incapaz de sacar adelante un personaje bastante perdido, no le hubiera sentado mal tener unos compañeros de reparto más fuertes, más cómicos y que no generaran cada vez más antipatía, porque mientras Cathy realizaba acciones marcianas y estúpidas, el resto se quedaba en el fondo sin poder interaccionar de igual a igual con ella.


Como drama, sin embargo, también han faltado ingredientes y una cazuela más grande para poder mezclarlos (diez minutos más de metraje). Para emocionar al público no se puede jugar con variables tan aborrecibles como el marido y el hijo, que no pasan de la caricatura y cuyas acciones son demasiado reprochables para que despierten algún tipo de simpatía. O el imbécil de Sean. Y Linney pone hoyuelos y para ella la misión ya está cumplida. Ni el guión ni su actuación ayudan a entender su paso de ama de casa aburrida a encantadora de hombres. Tampoco concretan qué ocurrió con el personaje interpretado por Idris Elba. Ni porqué Cathy vuelve con su marido si no le había dejado por culpa del cáncer. Con todo esto, los únicos que se salvan son el oncólogo, que suscita la ternura que no saben transmitir los demás, y la senil vecina, que era de los pocos secundarios con miga si esto realmente era una sutil comedia (y el tiro en la cabeza (aún) no venía a cuento).


Y puede que como Cougar Town no es de Showtime no quede bien hacer referencia a ella, pero a Darlene Hunt le convendría visionar unos cuantos episodios de la segunda temporada de la comedia de Courteney Cox y tomar nota sobre cómo hilar unos secundarios histriónicos alrededor de un epicentro incuestionable. Que The Big C al final fue un nada en concreto bastante insípido.

4 comentarios:

satrian dijo...

¿Hemos visto dos series diferentes?, yo creo que han sabido sacar el jugo a los secundarios, que lo de Idris Elba tampoco me parece importante, más preocupante es como desaparece Andrea en los últimos episodios, creo que han encontrado su humor y me parece que han tratado el tema del cancer desde una buena perspectiva, y Linney me parece que está muy bien, no solo actua con sus hoyuelos.
El problema el suicidio por guión, es lo único que estropea esta magnífica temporada.

BabyCatFace dijo...

Me parece que hemos visto series completamente distintas xD.

A mí me ha gustado mucho el tono que le han dado a la serie, y precisamente los secundarios me encantan. Desde Sean hasta Marlene, pasando por el hijo. Porque el hijo empezó siendo una caricatura, y un niñato sin más, pero con el paso de los episodios se ha ido viendo más de él, y tiene mucho más fondo del que parece. La única pega que le pongo es el personaje del marido, no porque me parezca un mal personaje (en los últimos episodios no ha estado mal), sino porque en un principio lo enfocaron tan sumamente mal que ahora aún me sigue chocando y chirriando un poco.

Pero por lo demás me ha parecido una primera temporada muy buena. Y Laura Linney hace un trabajo estupendo.

Crítico en Serie dijo...

Ya veo que he visto series distintas a vosotros ;)

La desaparición de Andrea es ridícula, porque te deja muy claro qué lugar ocupa Gabourey en todo esto (ninguno) y Marlene estaba bien y le pegan un tiro porque les da la gana. ¿Que tenía que morir antes que Cathy para que ella misma experimentara la muerte? Sí. Pero no en el 12º episodio y sin mucha explicación (¿La tenía? Sí. Pero necesitaban desarrollarlo durante un tiempo)

Atticus dijo...

Yo coincido con que podrían haberse dejado menos cabos sueltos, como lo de Idris Elba, la desaparición de Andrea y la vuelta con Paul y la precipitada muerte de Marlene; precisamente por eso le hubiera venido mejor tener algo más de duración, pero han creado un conjunto que hace que todo eso se me olvide.