lunes, 20 de diciembre de 2010

Hijos a la carta

Vemos una panda de motoristas tatuados hasta el omoplato y automáticamente presuponemos que una serie protagonizada por ellos será tan sensible como una película de Chuck Norris. Por lo menos esta era mi ignorante opinión, horrorizado por esa espalda cubierta con un hombre de la guadaña. Pero las formas a veces engañan, como ya debería haber aprendido hace tiempo, y Sons of Anarchy da mucho más de lo que parece a primera vista (o por lo menos tiene mucho y nada que ver).


Algunos vieron en ella, por ejemplo, reminiscencias al Hamlet de Shakespeare (una comparación tan cierta como ligera); otros encontraron una mafiosa familia de acogida, idónea para huérfanos de Los Soprano; y yo vi un buenorro con chupa de cuero, una historia de amor imposible y una matriarca desesperada. Quién hubiera dicho que el marido ideal iba a ir montado en una Harley.


El contexto de los clubs de motoristas tiene tanto de macguffin como de esencia. O sea, para hablar de cuestiones universales como la lucha interior entre el bien y el mal, la lealtad y el amor no hace falta rodearse de carburadores y revólveres. Esto lo digo para aquellos que sientan tanta indiferencia por este mundo como yo. Pero para diferenciar el producto sí que lo necesita. Da un toque intrínsecamente viril y encima la convierte en épica, como los grandes relatos, aunque a veces sea más de boquita que de hechos. Por lo menos en la primera temporada pocas veces llega la sangre al río y el espectador se inmuniza al darse cuenta que todo siempre sale rodado. Eso sí, si algún día ocurre, inundará las calles de Charming en una carnicería donde sólo Abel se libraría del castigo divino.


La gracia del asunto está en que el futuro del pueblo dependa en gran medida de Gemma Teller, entregada esposa y terrorífica madre. Ni tan siquiera los exagerados elogios que leía acerca del personaje hacen honor a esta mujer que mientras va al súper y revisa facturas es capaz de influir en la moral y objetivos de una banda de duros moteros. Pero lo mejor es comprobar cómo intenta inmiscuirse en la vida de su hijo Jax, con tal de que vaya por el mal camino. Tiene tanto de madre coraje como de zorra sin escrúpulos y Katey Sagal, a la que sigo sin ver el parecido físico con su personaje en Married with Children, tiene una presencia demoledora.


Charlie Hunnam, en cambio, a primeras parece que no naciera para interpretar a Jax. Fuerza su voz para que suene más masculina cuando en realidad no lo es mucho y encima se le agudiza y escapa el acento británico cuando le toca enfurecerse. Pero será por las contradicciones de Jax, que como le dice Tara tiene “un gran corazón”, porque además es guapo pero sin ser descarado, y encima tiene una gran química con Maggie Siff, lo que permite que no sea forzada su obvia tensión sexual, funciona.


Esta entrada era la opinión de la primera temporada, que empecé hace dos semanas. A estas horas, sin embargo, ya he terminado las tres temporadas, así que llegarán dentro de nada dos artículos más.

6 comentarios:

Patricia dijo...

Ay mira prime, je, je, la verdad es que esperaba ya el post.
Yo ,como ya te comenté , la baje para ver si hago seriefilo a mi santo marido , asi que me metí por la red buscando una serie que fuera de "chicos" , encontre SoA y paso lo que paso , a él que sólo ha visto la primera pues no le disgustó pero na de na y yo flipé en colores y me vi las tres, ( la última a ritmo USA)
A los cinco minutos de ver la serie ya estaba a los pies de Gemma Teller, que mezcla de madre coraje y zorra pero con todas las letras .
Me gusta todo, como maneja los tiempos , a las personas , todo . Y luego he de decir que el resto también me gusta, cuando cojen las motos y salen en orden haciendo una línea y luego una v , esa especie de codigo moral que se pasan por el forro de los c.... en cuando hay que traficar con armas , pero oye en Charming drogas no hay.
Y todos los demás, el que canta como elvis y hace pastelitos , el salido ( ese junto a Jax el que más) Oppi que me da un puntito de ternura y su padre en fin, hasta el mediohuevo.
Y podriamos hacer otro post sobre la agente Sthal , que hija de puta más buena.

satrian dijo...

Sí tiene algo de Hamlet la serie pero es eso una inspiración, y todas estas series bien sean de moteros, mafiosos, publicistas, o cocineros de meta con cancer, su primera imagen solo les da contexto, acabamos siempre con historias personales y familiares que es lo que realmente le da fuerza a estas series, lo único es que están ubicadas en un universo atractivo para el espectador.

Eloi dijo...

Yo solo he visto la 1a temporada (en DVD) y tengo la 2a y 3a pendientes.
Es una de las mejores series que he visto y he disfrutado un montón cada capítulo. El final de la 1a temporada es, en mi opinión, uno de los mejores finales de temporada de la historia de la televisión.
El problema es que no se donde encontrar la 2a temporada por Internet en VOSE. En SeriesYonkis está solo online, y yo prefiero tenerla descargada. Alguien sabe dónde puedo encontrarla?

P.D.
No soy capaz de entender como puedes mirarte 3 temporadas de una serie en 2 semanas. En mi opinión esto afecta mucho la recepción de la serie, pues una persona que la ve con calma sentirá mucho más afecto por ella que alguien que la despacha con 2 semanas.
Lo que hago yo es mirar un montón de series a la vez, de manera que entre capítulo y capítulo pasan unos días. Y NO, no me lío con tantas series xD

Crítico en Serie dijo...

Patricia, por norma general las series son más para el público femenino y unisex que el masculino. Pero el caso de SoA es curioso: tiene toda la pinta de ser una serie 100% masculina y en realidad tiene unas bases para engancharte completamente femeninas. Y aunque a Jax le vaya creciendo la barba, estoy irremediablemente enamorado de él. Qué hombre, por Dios.

Satrian, los personajes siempre son lo que vicia de una serie y también sus historias. Sin embargo, podría enganchar mucho más las peleas de bandas, la filosofía de los moteros, etc... y no. Sólo son fachada sin demasiado contenido (con respecto al núcleo duro y completamente culebronesco de los Teller).

Eloi, afecta la percepción de la serie porque si hay tres episodios de trance, del tirón son una noche, no tres semanas. Y si me permito zamparme las temporadas de un tirón es por varios motivos:
- Cuando vas el ritmo USA, a veces te apetece pegarte un maratón de algo. Y SoA me enganchó como no me esperaba.
- Estamos en unas semanas de baja emisión en USA, de tal forma que tengo muchos menos 'deberes' catódicos.
Y tercero... tiene bastante guasa que me hables de ver muchas series y no liarse. Diría que este blog es una prueba fehaciente del ritmo que llevo.

Eloi dijo...

Sí, realmente es un mérito que podamos ver tantas series a la vez. Si todo el mundo nos entendiera...

Atticus dijo...

Mira que dicen todos que la tercera temporada dió un bajón, pero cada vez tengo más ganar de verla.

Eso sí, antes tengo que terminar varias cuentas pendientes.