Hay series de casos que son tan simples que fingen ser cebollas y se cubren de capas para dar razones de más a los espectadores para seguir con ellas. Sirven de elemento de enganche para el que quiere ver algo de evolución de vez en cuando y sirve para crear momentos de tensión un tanto más creíbles. Cuando tus protagonistas se pasan el día con cadáveres y pegándose tiros, necesitas que ellos estén implicados a un nivel mucho más emocional para que tú también puedas interesarte.
Estas capas pueden servir de telón de fondo y definir la serie o pueden ser casos más o menos temporales: en Bones, por ejemplo, optan por dejar escapar a algún psicópata para así tener un elemento de tensión (el gormogón, el enterrador, el francotirador), aunque su verdadero enganche ha residido siempre en la relación de los protagonistas, y otras como Castle y El Mentalista juegan a largo plazo. En el caso de Castle, ni le funciona la TSNR forzada, ni una conspiración masónica sin pies ni cabeza (o así lo demostró en la season finale). Sin embargo, el verdadero interrogante surge cuando deciden dar un verdadero salto en la trama y cambiar las reglas del juego. Es entonces cuando una serie demuestra si da para unos cuantos años más o si tiene los días contados. De aquí que el público de El Mentalista esté un tanto desconcertado.
A partir de aquí, spoilers de las season finale de El Mentalista.
Pocos eran los que esperaban que el tema de Red John se solucionaría en el final de la 3ª temporada. Desde los inicios el responsable dio a entender que el misterio iba a ser el hilo conductor de toda la serie. Las pistas iban en esa dirección, con terceras y cuartas personas implicadas y una red que se antojaba un tanto más compleja. Pero con de repente cercenaron el tema. Así, sin comerlo ni beberlo, Patrick Jane se enfrentó a su némesis (¡Bradley Whitford!) y Red John terminó desangrándose. En lugar de buscar un gran clímax, optaron por una vía totalmente anticlimática que hasta dejó parado al mismo Jane. ¿Y ahora qué?
La respuesta, obviamente, no la tengo. Para eso tendremos que esperar a la cuarta temporada cuando seguramente se descubrirá qué llevará el argumento más allá de los casos a los que estamos acostumbrados. Red John ha dejado tras de sí alguna pregunta (¿cómo convencía a la gente para que le fuera tan fiel, como la asesina que se lanza al vacío?) y algunos hasta se plantean que no fuera él (algo muy remoto), pero la sensación que tuve fue que habían cerrado el tema: en un caso como este la mayor duda era saber la identidad del asesino. A partir de ahora, o no era lo que parecía, o tendrán que buscar otro conflicto que resolver. Bruno Heller, el creador, de momento ha soltado perlas como que podría no ser Red John y que Jane tendrá que ingeniárselas para no ir a la cárcel.
La verdad es que personalmente me intriga mucho más el porqué de esta decisión y la única explicación que le veo es que la propia CBS ha querido resetear la serie ahora que aún está en su época de esplendor. Tres temporadas son pocas y su desgaste hasta el momento ha sido mínimo, así que quizá han querido resolver el tema ahora antes de hacerlo cuando la serie esté de capa caída, dándoles entonces una razón para abandonarla con el cambio de ciclo. Pero todo son cavilaciones mías, puesto que aún tenemos que saber si todo era lo que parecía y si introducirán otro misterio para paliar la ausencia de capas. Algún arreglillo harán seguro. Claro que si todo era una falsa alarma, si Red John convenció a alguien para que se hiciera pasar por él, también habrá sido una tomadura de pelo. ¿Vais a pasar por el aro si es así?
6 comentarios:
Pere, yo soy de las que sigo todas las semanas The Mentalist, ha tenido momentos flojillos, pero no si Patrick hipnotiza a otros pero a mí síiiii, es tan mono!!!!, ahora bien, el capi doble final de la 3ª season a mí personalmente me dejó sin palabras, fue hora y media trepidante, hubo un momento en que me fui del pc mientras seguía la serie porque no quería ver lo que pasaba, vale no soy una seriófila como mucho de vosotros, pero hay que reconocer que fue bueno. Lo de Red John aún no me lo creo, supongo que nos llevaremos alguna sorpresa en la próxima temporada, la cual voy a seguir solamente por lo que se curraron esta final de season.
Por cierto, habrá última la otra tribu de la temporada???? por preguntar que no quede, jeje.
Yo creo que han querido evitar el "efecto Lost". Si seguían con la trama Red John, agrandando la red de influencia que éste ejercía, la cosa se les iba a ir de madre. A fin de cuentas esas preguntas sin resolver pueden ser respondidas con un poco de inventiva... ahora, pon 4 personas más dispuestas a suicidarse por Red
John y la cosa se convertirá en "Los Otros" de Lost, que también se suicidaban por una "causa" que finalmente se descubrió sin pies ni cabeza.
Eso sí, todo esto es considerando que realmente es Red John (que creo ha de ser).
Sobre esta 3ª temporada, las tramas no han estado tan cuidadas como antaño. Esta serie la sostiene, principalmente, el actor principal.
Yo, por cierto, no reniego de los procedimentales siempre que los protas tengan carisma. Siempre me consideraré fan absoluto de la ya caduca "Life" (de la NBC) que, por cierto, me recuerda bastante a El Mentalista en cuanto al personaje principal. Y el CSI original (el de Grissom) es una GRAN serie dentro de su género principalmente por sus actores, esa correcta ambientación de Las Vegas, y que, ¡qué carajo!, está bien hecha.
Pero volviendo a El Mentalista, sólo tienen que preocuparse en hacer los casos interesantes, que ya es suficiente.
Yo estoy un poco desencantado con todas esas series de "trama" que se las van inventando por el camino y terminan por ser un WTF inmenso. Vamos, que las nuevas series tipo Lost o Heroes (como The Event, Flashforward, y derivadas) ya casi las repudio por temor a que acaben en un sin sentido desproporcionado. A menos que sepa que su guión está ya escrito de antemano (como True Blood, Game of Thrones, o The Killing), huyo de ellas, con lo que un procedimental bien hecho y con buenos personajes me ha ganado muchísimo antes.
Isabel, sí que habrá última reunión de La Otra Tribu. El problema es que la semana pasada me encontré agobiadísimo por el proyecto y encima distraído por las elecciones. Al final se nos pasó a los dos grabar.
Bastian, la red de influencia se les iba de las manos o eso me pareció. Una cosa es que haya un psicópata retorcido... y la otra que tenga una milicia de personas dispuestas a traicionar a su país, sacrificarse y obedecerle (sobre todo gente tan guapa y supuestamente inteligente como el novio de Grace). Supongo que querrían quemar este cartucho ahora que aún tienen grandes audiencias para así poder abrir otro misterio la próxima temporada y no darles posibilidad de fuga a la quinta o sexta temporada, cuando realmente hay desgaste.
Y yo tampoco reniego de los procedimentales. Life, que tú recuerdas, era una de las pocas joyas que teníamos ese año en la televisión generalista. Aunque en ese caso la conspiración no era una capa sobrante de la cebolla, sino que definía el producto y de una forma u otra siempre estaba presente. Y el CSI de Grissom es para defenderlo a capa y espada. Bien hecho, un humor muy propio y unos personajes que ya son uno más de la familia. Lástima que nos intentaran imponer a Fishburne. Todo hubiera ido mejor si hubieran contratado a alguien para hacer de personaje secundario y hubieran pasado a un primer plano más obvio a los de siempre. Es lo que funciona.
Vaya, Pere, nunca coincidimos. Fijate, yo que reniego que tus adoradas series americanas, me encanta esta, no me creo el personaje y sus supuestas virtudes mentalistas pero da igual, porque es guapisimo - fiche a Simon ya como secundario en LA Confidential, me enamoro en "El Guardian, me pirró en "El diablo viste de Prada" y el personaje sinvergüenza de Patrick le viene al pelo. Actua con humor y naturalidad, igual que sus guiones nada rebuscados y como entretenimiento es estupendo, porque no se toman tan en serie como CSI o Ley y Orden, por no hablar de "missing", todos con esa cara de amargados encorbatados dando sermones a los malvados delincuentes. Simon Baker llegara lejos, recordemos que nadie tomaba en serio a Paul Newman por guapisimo hasta que se lo gano a pulso con sus papeles de sinvergüenza. Eso si, la trama de John el Rojo me carga, le da ese toque yanqui qde los serial-killers que tanto me desagrada.
Arantxa, en algo coincidimos: tampoco me creo sus virtudes mentalistas y Simon Baker hace un buen papel. ¿Que el personaje no me convence? Es más una cuestión de concepción que de interpretación. Y es 'un bon tros d'home' que diría en catalán. En El Guardián era monérrimo y en lo único que te llevaré la contraria es en El Diablo Viste de Prada. Él guapo lo estaba un buen rato, pero no sé qué les pasó en la sesión de peluquería y estilismos que le tiñeron las cejas demasiado rubias. Una lástima, porque su momento toalla es para recordarlo ;)
El Mentalista me hacía gracía sin creerme sus dotes mentálicas por el protagonista, el humor, etc. pero esta tomando un tufo repugnante. Sus guiones son cada vez más tramposos y repugnantes. He visto como el tipo listo, segurísimo de tener enfrente a John el Rojo, se carga a un tipo delante de un montón de personas pero asi se les terminaba el filón del psicópata a los guionistas, asi que rizan el rizo permitiendo que el infalible mentalista se equivoque de hombre y, para "justificar" el crimen, ponen a la victima de pederasta o algo asi y eso en los USA basta para absolver a un tipo por haber matado a un hombre que, al parecer, no tenía derecho a tener recibir un juicio. Y el absuelto, no solo no se arrepiente de su error, sino que hasta se jacta de haber engañado al jurado haciendo pasar a su victima por su psicopata favorito, claro que trabajando para una policia presunta defensora de la ley que le pregunta tranquilamente que tal sienta la venganza segun la ley del Linch, tampoco es de extrañar.
Supongo que hay que ser americana para qudarse tan tranquila y aplaudir semejante guión. Y veo que hasta los americanos se estan cansando, no me extraña...¡Ay, Simon Baker! Yo que tu me iria buscando otro papel como el de "El Guardian", que ese si que valía la pena...
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