Dicen que cualquier baja de un personaje en una serie siempre afecta a la audiencia. Es lo típico de siempre, el “no será lo mismo sin él” y el “pues no volveré a verla”. Hay pocas veces en los que la audiencia responde con indiferencia o hasta alegría, sobre todo cuando es el protagonista mediático, pero este es el caso de Laurence Fishburne y su Doctor Langston. Llegó a los laboratorios de los CSI de Las Vegas hace dos años y medio y al final no ha renovado el contrato para la 12ª temporada. Y es triste decirlo, pero pocos seremos los que le echaremos de menos. CSI ya era algo muy especial sin él y seguirá siéndolo.
Aquellos que se sientan atraídos a decir “es la excusa perfecta para que cierren la paradita” que antes se paren a ver la última temporada porque aquí lo que hay es un grave problema de percepción. Llevamos ya tantos años enganchando episodios de Las Vegas, Miami y Nueva York que al final uno acaba creyendo que todas son lo mismo, que todas tienen el mismo tono y que, si Horatio debe desaparecer, a las otras tampoco les vendría mal. Pero la última temporada emitida en EEUU, la 11ª, ha sido muy original, con casos bastante divertidos, ha sido la continuación de unos personajes (llevamos tantos años viendo a Catherine, Sarah, Nick, Brass y Greg que contemplar su evolución es un ejercicio televisivo muy interesante) y además nos ha brindado una lucha final con el némesis tremendamente retorcido de Langston, Nate Haskell. Ah, y ha seguido siendo muy moderna, un concepto que tiene mérito que siga vigente para esta serie cuando es la segunda más longeva del primetime estadounidense.
La marcha de Gil Grissom en su noveno año, sin embargo, fue un complicado obstáculo que superar. Era el alma de la serie y han sido lo suficientemente listos como para mantener el personaje aunque no aparezca en escena, con alusiones por parte del equipo, las actualizaciones de Sarah y la aparición curiosa de su madre. Pero igualmente iba a haber un vacío y los responsables decidieron fichar a un peso pesado, alguien relacionado con el mundo del cine que siempre eleva el caché y Fishburne ya daba el pego. Lo que no lo daba era su personaje.
Todos los chicos del laboratorio son tipos serios (menos Greg, que se lució con su romance con una femme fatale interpretada por Dita Von Teese), pero todos ellos saben reírse de la triste realidad. Están de vuelta. Para Langston, en cambio, crearon un personaje nada agradecido. Querían darle una identidad clara y dibujaron a alguien que llevaba una terrible carga en la espalda que no ayudaba al espectador a tenerle cariño. Su obsesión por no convertirse en un monstruo, ya que según él alberga instintos muy bajos en su interior, no terminaba de transmitirse y era un tanto pesado.
Tampoco ayudó, por supuesto, que le convirtieran en el protagonista central en detrimento de personajes más queridos (y queribles). Por esto será aún más interesante ver cómo lo sustituyen. Quizá habrán aprendido la lección y harán que la incorporación empiece de cero en todos los aspectos, sin necesidad de hacerlo el más listo y misterioso desde el primer minuto, y que alguien asciende y adquiera más peso. Que tras diez años de serie él fuera el mejor pagado y el centro era hasta insultante. Preocupó mucho más Nick cuando puso un pie en la bomba que le había preparado Justin Bieber que no Langston y su particular juego del gato y el ratón con The Dick and Jane Killer. De todas formas, una buena temporada.
3 comentarios:
Me duele ver a CSI así. La verdad que no me lo esperaba, pero es cierto que el personaje cansaba y mucho.
Hay que ver con que salen ahora porque una cosa era el éxito de la serie cuando se fue Grissom y llovían candidatos a ocupar su lugar a lo que es ahora que está pasando un poco más desapercibida.
En lo personal me gustaria que vuelva Grissom aunque lo veo muy difícil. Tendrían que arreglar un buen contrato con Catherine y sino, ya que la cadena lo quería seguir reteniendo a Charlie Sheen pese a que Chuck Lorre lo quería hechar (Y lo terminó logrando), que lo pongan a Charlie jajajaj.
Willows va a salir menos la temporada que viene, así lo ha pedido Marg Helgenberger en su contrato. Yo quiero que promocionen a Hodges :)
Francisco, creo que el mayor problema justamente es creer que una gran figura debe suplir a Grissom. Siempre he pensado que Sarah, Greg, Nick, Brass y Catherine tienen la suficiente entidad como para cargar con más peso y que incorporen a alguien nuevo desde cero en todos los aspectos (y sin venderlo como protagonista).
MacGuffin, Hodges lo pide a gritos pero, a diferencia de Greg, él no puede abandonar el laboratorio. Y sí, hará falta ver en cuantos episodios participa Catherine. La verdad es que CSI es una serie que se puede permitir descansos episódicos. No es como Cinco Hermanos.
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