viernes, 2 de noviembre de 2012

El epílogo de Fringe

La situación de J. H. Wyman es privilegiada. Se incorporó al equipo de Fringe en su segunda temporada y, tres renovaciones in extremis después, aún sigue en la producción, esta vez como showrunner en solitario después de que Jeff Pinkner se emancipara al final de la cuarta. Pero lo interesante de Wyman es que, como FOX encargó a la productora trece episodios para cerrar la serie, goza de una libertad absoluta para escribir y dirigir la trama hacia dónde le dé la gana.

Otra de las ventajas del responsable es que, como Fringe ya implementó varios game-changers a lo largo de su recorrido y se permitió ciertos juegos narrativos, de cara a las entregas finales no tiene límites infranqueables porque en esencia ya están de vuelta de todo. Así que él ha optado por tomarse estos trece episodios como un epílogo que nos llevara al futuro y, ya de paso, cambiar las reglas una vez más desarrollando el mundo que había presentado en Letters of Transit, imponiéndole la misión a Olivia Dunham de salvar la humanidad otra vez, en este caso en un futuro donde la sociedad está tiranizada por los observadores.

Esta apuesta es arriesgada no solamente porque es una locura situar la narración en un nuevo mundo que hay que mostrar y explicar, también porque Fringe tiene a Olivia, Peter y Walter fuera de la Fringe Division. En lugar de investigar sucesos límite-científicos, ahora forman parte de la resistencia que pretende derribar el régimen junto con su hija Henrietta. Y, mientras que suena muy ambicioso por parte de Wyman, me está resultando una operación bastante fallida.

Siempre he sido partidario de que Fringe es mejor cuando sabe conciliar sus dos principios básicos: la esencia procedimental y la mitología. Cuando utilizaba las investigaciones para conocer mejor a sus protagonistas y cuando fingía estudiar casos aislados que realmente nos permitían conocer un matiz más de la historia y avanzar en la trama. Adoro, por ejemplo, ese inmaculado tramo formado por la segunda mitad de la segunda temporada y la mitad de la tercera, donde era muy estimulante cómo hacían encajar las dos filosofías.

Por esto, aunque se hayan inventado unas cintas de vídeo que les obliguen a tener una misión en cada episodio, la quinta temporada está siendo descafeinada. Otras veces la serie ya perdió el rumbo, ya fuera porque habían olvidado qué la hacía excelente o porque no todos los experimentos funcionaban (la cuarta, si exceptuamos la season finale, fue muy decepcionante), pero ahora está apostando todas sus cartas en una jugada que quizá no debería haber pasado de la anécdota de la cuarta temporada, sobre todo tras el twist del quinto episodio.

Parece más un anexo o una mini-serie posterior que la conclusión lógica a cinco años de idilio con el espectador. Y, si tenía que despedir a Olivia y a los Bishop, hubiera preferido hacerlo en el universo donde tanto ellos como yo estamos más cómodos. No encerrados en un recuerdo de su laboratorio y luchando por sobrevivir en un mundo donde no encajan.

6 comentarios:

Albos dijo...

Yo reconozco que me interesaba ver qué pasaba en el mundo bajo el dominio de los Observadores, pero lo cierto es que no me satisface cómo pasa lo que pasa.

No me gusta la búsqueda de las cintas, una excusa barata para mantener una apariencia procedimental que Fringe ha perdido ya por completo, serializándose hasta la locura. No me gusta que en una temporada de cierre de 13 capítulos el arranque esté siendo tan lento (en una de 20-22 capítulos puedo entenderlo, pero en una de trece... ya va un tercio de la serie y no han empezado a pasar cosas 'de verdad' hasta el final del capítulo cuatro).

Además, no me gusta lo que pasa al final de dicho capítulo. Suponía que pasaría algo así, que conste, aunque no sabía con quién; y la impresión que se me quedó fue de cierta cobardía en la elección. Cierta gran cobardía.

Espero que Fringe recupere pronto el ritmo y forma de sus mejores momentos y pueda despedirse, como se merece, por todo lo alto. Aunque a este paso me parece que voy a mirar atrás con cierta melancolía recordando capitulazos como Earthling y White Tulip.

Unknown dijo...

Repetid conmigo: las cintas de vídeo son un macguffin. Como los números de Perdidos :)

Inma dijo...

Las cintas de vídeo son un coñazo. Una vale pero si van a estar así toda la temporada mal vamos! Yo pensé que la 5aT sería como el 4x19 que es un Capitulazo! Muy mal lo del capitulo final! Espero que esto se anime. A ver si cuentan qué ocurrió con Etta post su desaparición que me da que los Calvos tenían a todos los niños para reeducarles o algo así. No me gusta que Walter no tenga memoria otra vez. Hace que se apalanquen y que no avancen, y eso que la escena de su interrogatorio es un Escenón made in John Noble! A ver si descifran el arameo, tengo la sensación de que el plan de Walter y September era evitar la Invasión de los Calvos... Veremos el Otro Lado? Dónde está Nina? Emotivos los momentos reencuentro Madre e hija y con Broyles!

Lucas dijo...

Yo lo que no entiendo esq no hagan mención alguna al otro universo en la 5º temporada. Qué está pasando OVER THERE en estos momentos? a nadie se le ocurre intentar activar a Olivia para comprobar si allí también hay observadores? Quizá Walternate y Cya han dado con una solución...¿?
Me parece que el pilar fundamental de la serie (los dos mundos y su interacción) está siendo olvidado de mala manera, no le encuentro mucho sentido. Por lo demás la serie sigue bastante firme en cuanto a actuaciones/localización, etc... Perooo...Recuerdo años anteriores que Fringe caía si o si al día siguuiente (2 días máximo) de su emisión en USA y este año tiene que pasar toda la rueda de series de la semana (Con Homeland a la cabeza, qué serie!) y al final de la semana termina cayendo pero más por costumbre que por un disfrute verdadero.

Saludos! Lucas

Por cierto los captchas de tu blog por algún motivo suelen casi ilegibles (siempre fallo 3 mínimo xD)

Crítico en Serie dijo...

Carlos Sarmiento, no creo que haya cobardía pero sí considero, como tú, que no saben llevar la actual trama. No hay épica, no hay drama de verdad (aunque ese giro pretenda que así sea). Y tendría que haberlos como la última temporada que es.

Ramón, se cimientan en los personajes pero no creo que sea suficiente. La cuarta temporada también lo hacía y tenía muchos episodios literalmente aburridos porque les faltaba ritmo a los episodios y la narración no me parecía suficientemente dramática. Por esta razón, por más personajes que tengamos, no creo que la quinta temporada vaya por el camino correcto. Tiene los elementos... pero le faltan unos casos de la semana bien hilados. Al fin y al cabo, las cintas de vídeo no son lo mismo.

MacGuffin, basta de decir que las cintas son un MacGuffin. LO SÉ. Pero no me funcionan. No creo que a partir de ellas sepan dramatizar suficientemente los episodios, por más giro inesperado que haya.

Abril, lo de las cintas es muy absurdo. Otra vez no tiene memoria, otra vez tienen que unir unas piezas. Ya lo hemos visto antes y mejor. Y creo que Nina está fuera de juego porque la actriz estaba enferma. Lo comentó Marina en el último podcast, creo.

Lucas, ¿no sellaron los dos universos por separado la anterior temporada para que no pudieran viajar nunca más entre universos? De aquí que no puedan hablar de Walternate y Cia. Lo que es una lástima, todo hay que decirlo. Ah, y los captchas no los hago yo. A veces incluso yo tengo problemas para comentar en el blog. ;)

Inma dijo...

Ahh no sabía que la actriz que hace de Nina está enferma. En las fotos sale en silla de Ruedas así que imagino saldrá poco pero que saldrá...