Ya han llegado. Otros otros. Locke piensa que son un peligro. Ben, el mejor peor villano de la televisión, también. Y sí que lo son. Algunos se pusieron las manos en la cabeza al saber que aparecería más gente en la mística isla de Perdidos (Lost). ¿Qué pasó del misterioso y desierto bosque donde sólo vivían los perdidos y algún que otro oso polar? Ese intimismo está claro que es agua pasada. Ahora es difícil el momento en que un personaje camina por la isla y no se encuentra con un transeúnte. Pero es que Perdidos ha ido más allá. Cómo ya se dijo en esta página, ésta es una serie que cambia de concepto y que obliga a replanteársela constantemente. Y qué sublime sigue siendo puesto que habiendo cambiado el argumento inicial (de flashbacks y querer salir de la isla, a flashforwards y no querer marchar) logra ser igual de estimulante. Porque si Perdidos gusta es por los estímulos, y por este motivo se pasarán por alto los jugueteos (y trampas de guión) de la cuarta temporada: los flash-forwards.
En el season finale de la tercera tanda, vimos un futuro fuera de la isla. ¿Qué aportó? Saber que saldrían. Y ya está. No se desvela ningún motivo, ni responde los infinitos interrogantes. Asimismo, este recurso ya ha vuelto a ser usado en la nueva temporada y, indiscutiblemente, es estimulante pero: ¿qué aporta?
En los inicios de esta fantástica serie, los flash-backs nos ayudaron a perfilar quienes eran todos y cada uno de los pasajeros del Oceanic 815. Construyeron la psicología de los personajes. Se pudo ver al Jack cercano al olimpo y al Jack de los bajos fondos. Se entendió el embarazo de Claire, la estupidez de Shannon y la manipuladora Kate. Ayudó a definir multitud de universos. En cambio, los flash-forwards no crean mundo, sólo obligan a darse más cabezazos contra la pared. ¿De qué sirve saber que Jack y Kate conseguirán salir de la isla si no nos dicen por qué están traumatizados? Es una manipulación descarada del espectador de fe persistente. Y si se acepta es porque estimula. Se acepta el juego ya que distrae. Además, parecen poner puntos y finales, cuando ni tan siquiera se han escrito las frases.
Pero el espectador de Perdidos ya está acostumbrado. Cómo, sino, habría pasado por alto el precipitada puñalada de Locke, las contínuas referencias a filósofos, la resucitación del tuerto, los científicos de la Antártida (que jamás han vuelto a aparecer), las estaciones Dharma que nunca se acaban y todas las vueltas de tuerca en cada episodio que hacen mirar, siempre, hacia el lado equivocado.
En realidad, en todo espectador de Perdidos hay un ligero instinto masoquista. Juegan con él, lo maltratan psicológicamente con las dudas que van esparciendo y, encima, lo dejan a medias. Los flash-forwards aún han incrementado más esta sensación. La serie es un vicio y cada enigma sin resolver es un sinvivir. Es un aguijón clavado y que sólo los guionistas pueden sacar (parece que dentro de dos años). Es un dulce maltrato, un dolor exquisito. Y por este motivo, el espectador, necesitado de estímulos, siempre pide más. Yo pido más.
Perdidos se emite por la Fox y en la 2. La cuarta temporada se estrenará en la Fox el 24 de abril.
----------------------------------
Haciendo un punto y aparte, si el otro día se habló en Crítico en Serie de la música en la ficción, Perdidos es justamente una serie que tiene pocas posibilidades de explotar este recurso (por las circunstancias). Aún así, tiene una muy efectiva banda sonora que encaja bajo cualquier situación, ya sea de romance o una persecución. Sin embargo, de vez en cuando ha aparecido alguna canción fugaz cuyo más acertado ejemplo es este Delicate de Damien Rice en el episodio de la primera temporada llamado Lost in Translation. Es belleza en estado puro, representada por bella Yunjin Kim, y una de las muchas memorables escenas que tiene esta gran serie.
Hurley escuchando música mientras Sun se redescubre a si misma (lástima que las imágenes no sean de buena calidad)
12 comentarios:
Enorme artículo, Crítico. En tu línea. Y no puedo más que decir que tienes toda la razón del mundo. A los fanáticos de Lost se nos ha echado siempre en cara nuestro alto grado de masoquismo, por una serie que te insinua mucho, pero no te da casi nada...ay, pero es que cada vez que da...cada vez que da nos topamos con escenas tan alucinantes como la season finale del año pasado, o el capitulo flashback de ben, o el reencuentro de Sawyer con el sawyer original, o tantos y tantos momentos que nos han hecho reconciliarnos con la pequeña pantalla.
Me encantaba cuando Hurley se ponía el mp3 y sonaba algo al final del episodio, era "mi momento" pero han tenido que sacarlo con la excusa de que no hay pilas.. grrr...
Y más me encanta levantarme, poner a descargar Lost y encontrarme una página que dedica su entrada a Perdidos de manera sublime, que placer.
Tu entrada ha sido muy buena, no pararé de felicitarte, escribo esto mientras veo el youtube a un lado, y a Hurley se le acaban de terminar las pilas.. ¡Eso si fué una desgracia!
Hoy Lost 4x04! que vuelva la musica!!!
Por cierto, me encantaba la musiquita esa de piano de la primera temporada que ya no ha sonado más, de vez en cuando me viene a la cabeza, es muy bonita.
haha, tu lista de cosas q ves sube....
Yo soy consciente de ese lado masoquista porque cada vez que acaba un episodio y con más razón al final de la temporada, desprotico contra los guionistas, J.J. Abrams y toda su familia ... pero siempre vuelvo a la isla.
Yo me lo paso en grande con Perdidos. El truco es dejarse llevar y no pensar mucho, y la serie es un entretenimiento de primer orden.
Su música está muy bien, cierto, pero a mí siempre me recuerda a las bandas sonoras de las películas de Hitchcock :-)
Sunne, cierto lo de las pilas, pero es lógico. Yo me acuerdo que pensaba: ¿y nunca se le acaban las pilas?
Y luih, pienso como tú. Ya lo digo, que pido más. Además, la cuarta temporada me está sorprendiendo con su calidad. Me esperaba que la cosa perdería interés con los otros otros.
MacGuffin, hablas de lo de que te recuerda a Hitchcock con un "pero". Pues a mí me parece ideal que se parezcan.
lucía, yo la verdad es que no despotrico mucho. De hecho, los critico y perdono en el mismo post. (y yo cada día tengo más claro que el mérito debe ser más de Lindelof que de Abrams). No me pregunteis por qué.
Completamente de acuerdo contigo en todo.
A mí lo que realmente me mosquea es que por cada misterio que resuelven (alguna vez lo han hecho?), nos meten otros cinco. A estas alturas deberíamos tener algo más de información sobre la isla o los otros, por ejemplo, pero es que prácticamente no sabemos nada. Claro, que luego nos lo soltarán todo de golpe y nos quedaremos patidifusos.
http://yonomeaburro.blogspot.com/2008/02/perdidos-4x4-el-quinto-oceanic-es-aaron.html
has dejado un comentario en mr macguffin y te he localizado. cuando veas el cuarto de perdidos entra en mi blog y comparte ideas! otra lostadicta
estoy de acuerdisimo con lo de la música.. no solo las canciones melódicas como la del vídeo sino la banda sonora de michael giacchino es como la mejor banda sonora de película.
y por supuesto que todos somos un poco masoquistas xD a mi me encanta sentir esta frustración de no saber que leches está pasando..
Buah, este mediodía tengo que ver el 4x04 de Perdidos. ¿Cómo nos dejarán esta semana? Yo creo que vamos a seguir en ascenso, es decir, que seguiremos bien...
De todas formas, no dejes de entrar en
http://mitomania-dc.blogspot.com
si te gustan las series, los personajes que salen, su música, etc. Además,´podrás disfrutar de el programa de radio que hemos empezado hace poco, que se puede escuchar a través del blog o descargándolo. Un saludo.
Yo solo vi la primera temporada, la segunda se me hizo farragosa y lenta , además la trama, a mi gusto, avanza a bandazos y crea constantemente preguntas que raramente resuelve.
Siento ser tan agorero pero creo que el final de la serie será altamente decepcionante ya que no creo que consigan cerrar de manera satisfactoria las intricadas y diversas ramas argumentales.
En fin mis mejores deseos para lo sufridores , y pacientes, fans de Lost.
uff! k catastrofista! :S
Pero es la verdad... en verdad todos somos un poco masocas. Y nos encanta!
Buena crítica ;)
Publicar un comentario