martes, 30 de noviembre de 2010

No eres tú, soy yo

Me gusta cualquier tipo de cocina étnica. Da igual si es mejicana, japonesa, china o pakistaní. Si lleva algún tipo de indicativo geográfico seguro que me complacerá. Esto no significa, sin embargo, que opine que la cocina del país sea inferior. Es una cuestión de gustos y soy consciente de ello, de la misma forma que sé que esto también ocurre con las series. Uno puede amar ciertos géneros y saber diferenciar entre lo personal y lo objetivo a veces no es tan fácil. No siempre somos nosotros los destinatarios de los productos.


Para poner un ejemplo, muchas veces se me ha recriminado en mi vida cotidiana que no pare más atención a ciertas series, que no vea Sons of Anarchy y que sea incapaz de ponerme en serio con las seis temporadas de The Shield (que lo haré), de las que he visto algunos capítulos de por aquí y por allá, y las vea de forma ordenada. O que dejara Justified y en cambio siga con la séptima temporada de Anatomía de Grey. Pero son pocos que caen en la cuenta de qué comparten todos estos dramas: van destinados mayormente a un público masculino y heterosexual, y por norma general las series con este perfil me dan una extraordinaria pereza. De hecho, son de las pocas series que dan prioridad a los hombres (heterosexuales, repito) en vez de las mujeres, que tienden mucho más a ver ficción por episodios (de aquí que la hazaña del canal FX tenga mucho mérito).


Si nadie encuentra extraño que un solterón de cincuenta años pase de Cougar Town, no entiendo porqué se me tiene que recriminar que elija un poco lo que quiero ver. Nunca dije que la serie de Timothy Olyphant fuera mala. Al contrario. Pero a veces toca decir un “no eres tú, soy yo” y seguir con tu vida, como también sé que las bromas del séquito de Vince en Entourage tampoco están hechas para mí. Con las películas, aunque no sean del género que prefieras, sabes que al cabo de 100 minutos serás libre. Con las series la relación se puede prorrogar durante años y una cosa es saber de qué trata y qué tal está viendo un par de episodios. La otra es casarse. Y para casarme con series de este tipo necesito mucha calma, interés y encontrar el momento adecuado. Quizá llegará más adelante cuando se alineen los astros, que por alguna razón encontré un lugar en mi corazón para Rescue Me.


Otro reto que presenta no pertenecer al público potencial de una serie también es saber elegir el prisma con el que juzgarla, algo que nunca se supo hacer con Undercovers y No Ordinary Family. Las bofetadas que recibió la primera y el poco entusiasmo que ha acabado generando la segunda me hacen preguntar si las sobrevaloré después de su estreno (cuando estaba en pleno éxtasis con tanta llegada a la parrilla). Tomando como punto de partida que eran series confeccionadas para captar a las familias con retoños aún no entrados en la adolescencia, me parecieron aceptables. Personajes blancos, nada de protagonistas con reversos oscuros y unas peleas sin mala leche. Pero esto no significa que haya seguido con ellas.


Como adulto, me aborrecieron a la primera de cambio. Pero es que “no son ellas, soy yo” y aún dudo sobre si reafirmarme en mi primera opinión. El problema es que si alguien buscaba otro Alias a pesar de que avisaran que no lo era, acabó decepcionado. Y si alguien esperaba conocer una familia como Los Increíbles pero descubrió que no había la magia de Pixar y la redondez de los guiones de Disney, la serie de Julie Benz y Michael Chiklis también le habrá dejado a medias. Claro que tampoco tengo hijos para verlas con ellos y comprobar si como experiencia en familia valen la pena. ¿Alguien ha hecho el experimento?

18 comentarios:

Adriii dijo...

Me encanta esta reflexión porque a mí me pasa mucho. Precisamente con Justified. La dejé, a sabiendas que era una buena serie y que cuando acababa de ver un episodio era consciente de que estaba bien, pero ni me enganchaba ni me interesaba especialmente. Así que soy consciente que soy yo.

A veces duele que algo no te guste cuando sabes que es bueno y debería gustarte :P

Vanessa dijo...

No, yo a los Powell de Chiklis los dejé de lado a los 10 minutos de haber comenzado el piloto. Por vergüenza ajena.

Haces una muy buena reflexión en este post, hablas de algo que parece tan difícil de entender para algunos y que en cambio, es tan simple.

¿El hecho de que a mi no me guste Veronica Mars significa que sea una mala serie? ¡En absoluto, yo jamás dije esto! En cambio, parece que por el simple hecho de no disfrutar de algo que es del gusto general, estés tachando a la serie de basura.

Tú y yo somos de los pocos que no ve Dexter, o yo por ejemplo no estoy disfrutando mucho con The Walking Dead. Es claramente un "no eres tú, soy yo".

Es lo que comenta Adri, crees que debería gustarte, porque además te estás perdiendo 'pequeñas fiestas' en Twitter o en los blogs, pero en el fondo, da igual. ¡Qué pereza! Con la gran oferta que hay...

Yorch dijo...

Me uno a los que tampoco ve Dexter. Interesante entrada.
Hay muchos "no eres tú, soy yo" a los que incluso no se les da la oportunidad, pero es que huelen a algo que no te va a gustar desde lejos...

Me encanta que te guste Rescue Me ^^

BabyCatFace dijo...

Buena entrada ;).
La cosa es que muchas veces parece que hay que ir pidiendo disculpas cuando no te gusta una serie que a los demás les encanta. Y todo eso sin decir que sea mala, simplemente que no te gusta porque no es para ti.
A mí me pasa con Fringe, que sí, que vale, que todo el mundo dirá maravillas de ella y no dudo que sea estupenda, pero no es para mí. Y con The Walking Dead tres cuartos de lo mismo: los zombis no son lo mío, con lo que lo raro sería que esta serie me llamase lo más mínimo.

SR. WATANABE dijo...

Creo que al fin y al cabo es una cuestión de Conexión. Tu parte más racional es capaz de ver las virtudes de una determinada obra pero tu manera de sentir las cosas no acaba de conectar del todo con ella. A mi Justified me gustó mucho, pero aunque (¡ojo!) también disfruto de In Treatment y Friday Night Lights, nunca llego a conectar tanto con ellas tanto como lo hacéis muchos de vosotros.

Óscar Rus Vicente dijo...

Yo tengo una espinita clavada, no he podido conectar ni con 'Alias' ni con 'Community', ambas las dejé alrededor del capítulo 8 o por ahí.. y es que aunque me gustaban, no me entusiasmaban y una serie tiene que engancharme mucho para que yo siga con ella.

Y al principio me pasaba con Fringe, veía los capítulos sin más pero no me entusiasmaba demasiado y llegados a la tercera temporada, realmente me ha enganchado siguiéndola a ritmo estadounidese, disfrutas mucho más los episodios.

Y un sin fín de series que no conecté con ellas como 'Big Love', 'Dexter', 'Mad Men'..

Julio C. Piñeiro dijo...

A ver eso de que "esa serie me tendría que gustar" roza un poco lo fascistoide. Sinceramente, cada uno que vea lo que le dé la santa gana. Eso sí, para criticar (comentar negativamente) una serie es imprescindible haberla visto y conocer sus principales rasgos.

Sí, es cierto, el hecho de dedicarse (de manera profesional unos pocos afortunados y amateur la mayoría) a escribir sobre algo, parece que incluso está uno obligado por decreto a ver determinado tipo de serie en plena boga.

Gran artículo, Pere. Me llevará algún tiempo comprobar si, como tú dices, las mujeres son potencialmente más consumidoras de TV que los hombres (homos o heteros).

Patricia dijo...

Pero corazón ¿porque has de justificar lo que te gusta o no?
Yo hace mucho que deje de hacerlo.
Todos tenemos series o pelis o libros ( mira yo envie a tomar viento fresco a "Los Pilares de la Tierra") que no nos van.
Hemos de adaptarnos a lo que creen los "pensadores" de las cadenas, pues la llevamos clara, porque yo soy una flipada de Son of Anarchy y The Wire, The Shield y a Anatomia de Grey la mande a la mierda , es más tengo a la protagonista delante y la abofeteo por gilipollas.
Y luego tengo "pecados" de los cuales me avergüenzo en publico y que sigo capitulo a capitulo ( en mi caso fue El Internado).
O sea que descuadramos a los programadores ¿no?.....
Y bueno me despido con la "manita" abierta.....

Eloi dijo...

Estoy de acuerdo en algunas cosas, pero creo que el hecho de que a algunos de vosotros no os guste Dexter o Alias es muy fuerte, pues ambas son el concepto puro de serie llevado a la perfección.
A mi me cuesta mucho encontrar series que no me gusten (probablemente porqué me aconsejan muy bien) y cuando hay alguna normalmente ya había olido que no me gustaría. Eso no quiere decir para nada que trague cualquier basura; simplemente, mis gustos son muy amplios. Una serie me gusta siempre y cuando cuente una buena historia y los actores sean creíbles.

Fon dijo...

Yo sigo ahí, semana tras semana con los Powell, que aunque me gustaron bastante en su piloto, el segundo epi me pareció un reverendo coñazo. Pero el tercer epi me encantó, y me quedé definitivamente con ellos. Y aunque no es una serie con mayúsculas me tiene entretenido, y oye, que la Reeser me encantó en The OC, y aunque no tiene mucho protagonismo, es ella un incentivo para la serie.

Crítico en Serie dijo...

Adri, yo hace tiempo que he decidido que no soy el target de algunas series. Esto no quita que debería ver más de The Shield o SoA, pero tengo que encontrar el momento.

Vanessa, que conste que si no veo Dexter es porque me parece MALA (ahora he empezado el Proyecto Dexter que consiste en retomarla, ni que sea para seguir cargándomela). La paradoja es que a veces sigues series que sabes que son malas y dejas de seguir algunas que sabes que son buenas. Pero bueno, que eso son los gustos, al igual que me gusta la comida mejicana y no me entusiasma la finlandesa.

Yorch, tengo que retomar Rescue Me. No he visto la 5ªT y tengo ganas. ¿Qué pasa? Que la noto más lejana que otras series y por eso siempre pasan otras por delante, a pesar de que me encante.

Mina, a veces sí toca decir que algo es malo y que por eso dejas de seguirla. El problema que tiene Fringe, sin embargo, es que a medida que avanza mejora mucho y aquí es donde surgen los talifanes (en este caso yo soy uno de ellos). Dejé la serie como tres veces antes de darme cuenta de qué tenía delante. Claro que el problema es de la serie, que tardó una temporada y media en arrancar.

Watanabe, con FNL lo entiendo muy bien. Yo conecto mucho porque además me gusta el género 'teen'. Pero si esta etapa ya la ves muy lejana... la puedes saborear porque es adulta, pero quizá te cuesta más involucrarte. Mi propia madre la sigue encantada, pero me reconoce que disfruta más con Mad Men, supongo que por cercanía.

Crítico en Serie dijo...

Oscar, pues Community la dejaste justo cuando llega a su esplendor. Quizá no era para ti, que conste, aunque si estuviera en tu lugar vería el episodio de "Modern Warfare" porque creo que es un episodio para todo el mundo. Con respecto a Alias... mejor para ti. Menos horas delante del ordenador para un final ridículo (bueno, pero que no me quiten lo bailao, que también fue mucho).

Julio C. Piñeiro, por supuesto veo lo que me da la gana, pero a veces te sabe mal no disfrutar más con series que sabes que son buenas. O sea, Boardwalk Empire me puede parecer muy buena pero me da una pereza tremenda. En todo esto no estoy hablando de series que deberían gustarme y no me gustan, sino de las que sé que son buenas y no me atraen. El asunto cambio. Quiero reiterar que odio Dexter y no se trata de "perdonadme" sino de "me parece que es mala y punto final". Y sí, cualquier estudio apunta que las mujeres ven más ficción televisiva y los hombres menos.

Patricia, ¿Tú de qué equipo eres? ;)
He escrito este artículo para que la gente se dé cuenta de algo: Opinar que una serie está bien no significa que debes seguir con ella. Y esto a los hombres les cuesta aceptarlo, cuando la mayoría de heterosexuales reniega de Cougar Town. Y yo creo que es increíble, sobre todo a partir de mitad de su primera temporada, donde encuentran su tono.

Eloi, Alias me encantó (con sus descalabros argumentales) y Dexter me horroriza de tan mala. Para nada me parece perfecta. Mi gran batalla.

Fon_lost, yo la sigo (a modo fastforward) por Autumn (Californiaaaa, Californiaaaa) y porque ahora encima aparece el niño de Kyle XY que ha crecido. Pero la veo demasiado light. Me interesa el tema 'teen' y nada de lo adulto, ni tampoco la trama oscura. Diría que algún día la dejaré... pero como la cancelarán ni me tendré que tomar las molestias.

Álex dijo...

Muy de acuerdo con tu reflexión, a mi me sucede lo mismo con los procedimentales, sé que pese a su rígido formato se puede uno encontrar grandes series, pero es que no veo el momento de ponerme con ellas (por ejemplo The Good Wife). Eso sí, luego llego, me cruzo con Brenda Johnson y me enamoro perdidamente de una serie policiaca.

Un pequeño apunte respecto a SoA, pese a que pueda parecer una serie rebosante de testosterona (que lo es), curiosamente, su parte más interesante y el verdadero motor de la historia, está en los personajes femeninos. La matriarca del clan es la que corta el bacalao y el resto de mujeres que aparecen no se quedan atrás. Creo que el día que te pongas con la serie, te pasará como a mi, amarás por encima de todo a Katey Sagal como Gemma Teller. A su modo, es otra desesperada más que tiene que lidiar, y resolver, los problemas de su familia.

Un saludo.

Labekoa dijo...

Cuanto mas te leo o escucho mas me doy cuenta de que aunque nuestros gustos en series son muy distintos, (yo adoro Justified, The Shield o SOA), tengo que admitir que eres un monstruo argumentando y que ademas esta vez tienes razon.
Es cierto que hay series que ya desde su titulo o por la cadena en que las emiten van diseñadas para un publico concreto, pero a veces da incluso satisfaccion saltarse los designios de los de marketing y ser capaz de disfrutar al mismo nivel con Cougar Town y Justified, dos series diametralmente opuestas.
Asi que revisa Dexter y puede que ahora te guste.... Y si no es asi, siempre te quedara el disfrutar de los paisajes de Florida, de los tacos de su hermana o de las camisas del prota.

titania (Verónica) dijo...

Pere, qué razón tienes. Yo ya he pasado el tiempo en el que tenía que dar explicaciones por lo que veía y por lo que no, veo lo que me apetece y punto, y me da igual si la serie se considera buena o mala.
Por ejemplo, estoy atascada con la tercera de Breaking Bad y no consigo avanzar, cuando todo el mundo dice que es espectacular y ni siquiera he empezado con Broadwalk Empire ni con Treme, perezón.
Pero sin embargo sigo viendo Gossip Girl y Life Unexpected (aunque todavía me pregunto por qué...) y también sigo a los Powell (seguramente hasta que los cancelen).
Y disfruto como una enana de SoA, Dexter o The Walking Dead, amén de Fringe, que ya estoy nerviosa perdía porque esta semana hay capi.
Mi filosofía es que para gustos los colores, y tienes muchísima razón cuando afirmas que aunque algo sea muy pero que muy bueno, puede "no ser para ti". Y punto. No hay más que hablar. :-)

Crítico en Serie dijo...

ALX, si me vendes a Gemma Teller como una "desesperada" entonces quizá caigo en sus redes. Dentro de un tiempo quizá le doy una oportunidad a SoA. Pero de momento tengo que acabar muuuuchas cosas y las pésimas críticas a la tercera temporada tampoco ayudan.

Jon Paul, bah, lo que te pasa es que ahora me ves con buenos ojos ;) Y por supuesto me encanta saltarme los convencionalismos marcados por los targets. Muy a menudo ya lo hago, lo que pasa es que a menudo cuesta. No me verás nunca riéndome con Entourage, por ejemplo, aunque admiro que tú si lo hagas con Cougar Town.
Y más que disfrutar de los paisajes de Florida... disfrutaré apuntándome en una libretita todas las chorradas de Dexter y sus degenerados compañeros de trabajo.

Titania, Boardwalk a mí también me da una pereza increíble a pesar de que el piloto me encantó, seguramente porque la veo muy impoluta y perfecta... pero no vi ningún posible vínculo emocional.
Eso sí, deberías replantearte lo de LUX. Que conste que yo la veía hasta hace poco. ¡Pero es que es dolorosamente mala! El problema que tienen es que cuando son malas, lo son tanto que te encanta seguirlas para seguir despotricando. Pero esto estoy seguro que es malo para la salud ;)

Torpe Dama dijo...

Vaya, había escrito un comentario superlargo y se me ha bloqueado la página. En fin, resumo:

Vanessa comentaba en su blog algo parecido. Más allá de posibles prejuicios, la verdad es que uno se conoce a sí mismo y sabe qué le va a gustar y qué no.

Y no sólo eso, en mi caso hay series para determinados momentos: no me apetece ver lo mismo a media tarde que después de cenar, ni si tengo un mal día o estoy cansada.

Crítico en Serie dijo...

Torpe Dama, mira que cabrea que la página falle cuando dejas un comentario...
Y esto que comentas de dividir las series según franjas horarias, pues me pasa lo mismo. TGW la tengo que dejar para las 12 de la noche, cuando ya he cenado y aún no tengo sueño y puedo concentrarme en ella. Parenthood, GG y demás chorradas tocan a la hora de comer, porque si no las veo con mucha atención no tengo remordimientos. Y podría seguir con todos los rituales teléfilos que ejecuto noche sí y noche también... ;)