Olivia Dunham y la extraña renovación de Fringe

Fringe ha renovado para una cuarta temporada. Necesito repetirlo porque no me entra en la cabeza: Fringe ha renovado para una cuarta temporada. Parece que fuera ayer cuando vaticiné que tenía por delante una polémica cancelación (uy, ¡pero si lo era!) y esta madrugada el productor Joel Wyman ha twitteado que la Fox ha decidido quedarse con la serie para la próxima temporada. ¿Y lo mejor? Que no han pedido 13 episodios con la opción de extender la temporada, sino que directamente han encargado una temporada entera de 22. Por lo que parece, tienen mucha fe depositada en la serie.

Explicaciones, supongo, hay unas cuantas y creo que la verdad es una mezcla de todas ellas más algunas de las que no se ha hablado mucho y aún nos enteraremos de menos. Como explica la página TVByTheNumbers (que debería dejar de creer a pies juntillas), la Fox ha mejorado sus cifras del viernes en un 38%, aunque Kitchen Nightmares obtenga mejores datos que Fringe y encima sus costes sean inferiores gracias a que se trata de un programa de telerrealidad. Y también es cierto que, a pesar de un mínimo del 1.3 en los demográficos contra el baloncesto, las audiencias totales con la inclusión del DVR superan los 2 puntos, que no aporta beneficios directos pero permite tener la esperanza de que ese público vaya a sumarse otro viernes a la audiencia en directo. No obstante, hay dos cuestiones que no están directamente relacionadas con las cifras en bruto: las negociaciones entre la productora y la cadena, y las perspectivas de la cadena de cara al próximo otoño.

La FOX es una network, una generalista, un tanto fuera de lo común. En lugar de tener tres horas diarias de contenido propio en su primetime, sólo tiene dos y mientras la NBC, la ABC y la CBS emiten series como L&O: SVU, The Good Wife o Brothers & Sisters a las 22h, ellos emiten los telediarios locales de las cadenas afiliadas. Esto hace que de cara al año que viene tengan muy pocos espacios. Las comedias de animación ocupan el bloque del domingo y entre House, Glee, Raising Hope y Bones, más la llegada de la macroserie Terra Nova y de X Factor (que llenará tres horas), casi no queda espacio. Así que, si añadimos Fringe al line-up del otoño que viene, sólo queda una hora para programar que seguramente será en viernes, a menos que Huesos acompañe a Olivia Dunham en tan complicada noche. ¿Tan malos son los pilotos encargados? ¿Y se mudará Huesos? Hay que recordar, sin embargo, que la Fox ya hizo extrañas renovaciones como la de Lie To Me durante dos años seguidos y de Human Target la temporada pasada tras mediocres resultados.

Y, para terminar, lo que en realidad me gustaría saber: cuáles son los términos del acuerdo. Aunque la serie se emita en FOX, hasta ahora los ingresos de su explotación fuera de los Estados Unidos y también del mercado interno con productos como el merchandising y los DVDs pertenecían a la Warner. Por lo tanto, una de dos: o la productora ha decidido rebajarles el precio de los episodios de forma sustancial, con recortes presupuestarios incluidos como comenta Satrian (que Fringe no es una serie especialmente barata), o la propia cadena se beneficiará de los ingresos internacionales y del comercio de sus productos derivados en el propio país.

Estos acuerdos, sin embargo, suelen quedarse de puertas para dentro, así que seguiremos sin saber cuál es la fórmula perfecta para renovar una serie que tenía todas las papeletas para ser cancelada. Claro que siempre cabe la posibilidad que los ejecutivos de la FOX no crean posible mejorar sus datos en los viernes y encima le tengan un especial aprecio a la serie. O sencillamente debemos sumar este aprecio a todo lo anterior. Sea lo que sea, larga vida a Olivia, Walter, Peter y también a las personas de carne y huesos que hacen posible una de las grandes y que podrán seguir alimentando la buena televisión un año más.